José Antonio Kast, fundador del Partido Republicano y ex candidato presidencial, ha hecho una serie de declaraciones notables durante su intervención en la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC) celebrada en Brasil. Su discurso, cargado de polémicas afirmaciones, giró en torno a la situación política y social actual en Chile.
Kast comenzó agradeciendo a los organizadores del evento, que contó con la presencia de figuras como Jair Bolsonaro y Javier Milei. En su intervención, afirmó que «uno de los principales problemas que tenemos hoy día en Chile para ejercer la libertad de educación, la libertad de pensamiento, la libertad religiosa y todas las libertades, es la inseguridad». Según Kast, la izquierda, al llegar al poder, busca despojar a la ciudadanía de sus propiedades y libertades.
El político conservador pintó un sombrío panorama de Chile, hablando de un país asolado por el temor. Según él, los ciudadanos viven atemorizados por la posibilidad de ser asesinados, violentados o violados si se aventuran a salir a la calle. «Chile hoy día vive con miedo. Miedo que obliga a los ciudadanos a encerrarse en sus casas», afirmó. Además, denunció que «en Chile el narcotráfico y el crimen organizado avanzan sin control», como ocurre en casi todos los países donde gobierna la izquierda.
Kast también hizo hincapié en la necesidad de fortalecer y apoyar a la policía, trabajar en la unidad familiar y recuperar la libertad en los barrios. «La izquierda radical que nos gobierna hoy en Chile no entiende que la seguridad es un derecho fundamental y que también es una condición indispensable para el progreso. Sin seguridad, no hay libertad y sin libertad, no hay progreso», aseguró.
En su discurso, el líder del Partido Republicano citó a los gobiernos de Nayib Bukele en El Salvador y Javier Milei en Argentina como ejemplos a seguir. Sobre el presidente salvadoreño, afirmó que «recuperó la seguridad y logró la libertad con un liderazgo claro». Respecto al mandatario argentino, se refirió a él como «un defensor de la libertad, alguien que va a recuperar el progreso y el desarrollo de Argentina, nación destruida por la izquierda radical».
Kast no tuvo reparos en criticar la administración del presidente Gabriel Boric y al Partido Comunista. «Nosotros debemos recuperar el orden, el valor de la democracia representativa, el valor de los derechos humanos universales y recuperar el consenso de que la violencia no es aceptable como método de acción política», dijo. En este sentido, afirmó que, aunque fue elegido el presidente Boric, «gobierna el Partido Comunista», a quien acusa de ser un defensor de dictaduras como Cuba, Venezuela y Nicaragua.
El político conservador también reprochó a quienes lo tildan de extremista. Según él, es un defensor del sentido común, mientras que los verdaderos extremistas son los comunistas, a quienes acusa de ejercer la violencia, destruir los países y adorar dictaduras que han traído violencia y miseria a millones de personas.
El cierre de su intervención estuvo centrado en Venezuela y en las elecciones presidenciales del 28 de julio. Kast afirmó que Nicolás Maduro deberá abandonar el poder ante la presión internacional. Según él, la ONU y la OEA deben dejar de ser «organismos de adorno» y actuar ante las violaciones de los derechos humanos en Venezuela, Cuba y Nicaragua. Asimismo, calificó a Maduro como un «peligro para la seguridad de Latinoamérica» y abogó por la conformación de una gran coalición con países como Brasil, Argentina, Ecuador y Chile para liberarse del comunismo y las dictaduras de izquierda.