Rusia ha anunciado que sus fuerzas militares han tomado el control de una aldea en la región de Donetsk en el este de Ucrania. Este anuncio llega en medio de la lenta progresión de Moscú en el campo de batalla. El Ministerio de Defensa ruso ha declarado que sus tropas han «liberado la aldea de Sokil», que está a unos 30 km al noroeste de la ciudad de Donetsk, la capital de la región homónima que Moscú ha afirmado haber anexado en septiembre de 2022.
Las fuerzas rusas, que han estado aprovechando las dificultades del ejército ucraniano debido a la falta de personal, municiones y armas, han estado ganando terreno desde hace varios meses. Kiev considera que los peores combates del frente están ocurriendo actualmente en la región de Donetsk.
El presidente ruso, Vladimir Putin, reiteró el viernes que Ucrania debe abandonar las regiones que Moscú reclama como propias (Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersn) si quiere la paz.
Además, alrededor de 100.400 clientes en un total de 348 asentamientos seguían sin electricidad este sábado después de un ataque ruso contra una infraestructura energética en la región de Sumy, en el norte de Ucrania. El Ministerio de Energía ucraniano proporcionó la información este sábado.
«Anoche fue atacada una instalación eléctrica en la región de Sumy. Como resultado, los consumidores domésticos e industriales de las regiones de Sumy (en particular la ciudad de Sumy) y Jrkiv quedaron sin electricidad», dijo el Ministerio en un comunicado en su cuenta de Telegram.
El Ministerio también precisó que, mientras los consumidores de la región de Jrkiv ya han sido reconectados a la red, esta mañana 100.400 clientes en 348 asentamientos de la región de Sumy seguían sin suministro eléctrico.
Además, el suministro de agua a la ciudad de Sumy se interrumpió temporalmente como resultado de un ataque ruso con drones, según informó la cadena pública ucraniana Suspilne, citando a la compañía de agua Gorvodokanal.
Por otra parte, Ukrenergo, la compañía energética estatal de Ucrania, ordenó no aplicar restricciones al consumo de electricidad entre las 10:00 y las 15:00 horas del sábado en todo el país debido a la disminución del consumo durante el fin de semana y el aumento de la generación en las centrales eléctricas.
La situación en Ucrania, en particular en la región de Donetsk, continúa siendo tensa y volátil. A medida que las fuerzas rusas avanzan, el impacto en la vida diaria de los ucranianos se hace cada vez más evidente, con cortes de energía y agua que afectan a miles de personas.
El conflicto en Ucrania ha estado en marcha desde 2014, cuando Rusia anexó Crimea. Desde entonces, las tensiones han continuado escalando, con luchas frecuentes y la intervención militar rusa en el este de Ucrania.
El avance de Rusia en Ucrania ha sido ampliamente condenado por la comunidad internacional, con muchos países imponiendo sanciones a Rusia. A pesar de esto, Rusia ha continuado con su campaña militar, lo que ha llevado a una creciente crisis humanitaria en Ucrania.
La reciente toma de la aldea de Sokil en la región de Donetsk por parte de las fuerzas rusas es un indicador más de la creciente influencia de Rusia en la región. Con la amenaza de más ataques a la infraestructura ucraniana, la situación para los ciudadanos de Ucrania se está volviendo cada vez más precaria.
La comunidad internacional está observando de cerca la situación en Ucrania, con la esperanza de una resolución pacífica al conflicto. Sin embargo, con la continua agresión de Rusia, el futuro de Ucrania sigue siendo incierto.