El pasado sábado se produjo un trágico incendio en una guardería en Nueva Delhi, la capital de la India. El incidente fue confirmado por un funcionario del servicio de bomberos, quien informó que la tragedia había provocado la muerte de siete bebés. Este lamentable suceso se suma a la creciente lista de incidentes de incendios en la India, donde las violaciones de los códigos de seguridad y las leyes de urbanización son moneda corriente.
El rescate de los afectados se realizó con rapidez, lográndose salvar a 12 recién nacidos que se encontraban en el lugar. Los menores fueron llevados inmediatamente a un hospital cercano. Sin embargo, el responsable de bomberos, Atul Garg, informó con gran pesar que cinco de ellos murieron por inhalación de humo.
Los otros cinco sobrevivientes también sufrieron por la inhalación de humo. Afortunadamente, pudieron ser estabilizados y están recibiendo la atención médica necesaria para su recuperación.
El incendio devastó el primer piso de la guardería. La intervención oportuna del equipo de bomberos permitió que el fuego fuera extinguido luego de una hora, según informó otro bombero, Suresh Kumar.
Actualmente, las autoridades se encuentran investigando la causa del incendio, el cual se registró en el distrito de Vivek Vihar, al este de la capital.
Este incidente no es aislado. Horas antes, el sábado, un incendio en un parque de atracciones en la ciudad de Rajkot, en el estado de Gujarat, en el oeste del país, causó la muerte de al menos 27 personas.
Los incendios son, lamentablemente, comunes en la India. Esto se debe en gran medida a que constructores y residentes evaden con frecuencia las leyes de urbanización y los códigos de seguridad. Esta falta de cumplimiento de las normas de seguridad aumenta el riesgo de incidentes de incendio, poniendo en peligro la vida y la seguridad de las personas.
La magnitud y la frecuencia de estos incidentes de incendios en la India ponen de manifiesto la necesidad urgente de una mayor aplicación y respeto de las normas de seguridad y urbanización. Es esencial que se tomen medidas para garantizar la seguridad de las personas, especialmente de los más vulnerables, como los niños en las guarderías. La pérdida de vidas humanas es siempre una tragedia, pero es aún más desgarradora cuando se trata de vidas jóvenes y prometedoras que apenas comienzan a descubrir el mundo.
Mientras las autoridades siguen investigando las causas exactas de estos incendios, es fundamental que se tomen medidas preventivas para evitar que se repitan tragedias similares en el futuro. La educación, la concienciación y el respeto por las normas de seguridad son fundamentales para prevenir incidentes de incendio y garantizar la seguridad de todos.