El pasado viernes 26 de abril, la dura realidad del fútbol golpeó a la Serie A italiana y en particular al equipo Salernitana, donde milita el guardameta mexicano Guillermo Ochoa. La escuadra sufrió una contundente derrota (3-0) frente al equipo Frosinone, un golpe que finiquitó su descenso a la Serie B de Italia.
Este descenso significa que el Salernitana se queda sin ninguna posibilidad matemática de permanecer en la Serie A, la máxima categoría del fútbol italiano, ni de competir en los playoffs del descenso. A cuatro jornadas de finalizar la temporada de la Calcio, el panorama para el equipo es desolador: se encuentra en el sótano de la tabla con apenas 15 puntos acumulados en 34 jornadas.
En el transcurso de estos 34 partidos, Ochoa solo fue titular en 21 de ellos. El resto de las titularidades recayó en el portero francés Benoit Costil, de 36 años, quien registró 13 participaciones. Esto habla de las decisiones tácticas y estratégicas que ha estado tomando el equipo en busca de mejorar su desempeño y sortear la difícil situación en la que se encuentra.
A pesar de los esfuerzos, el equipo donde “Memo” hace vida deberá afrontar los últimos cuatro compromisos de la temporada con la certeza de su descenso a la categoría de plata del fútbol italiano. Y la agenda no se presenta sencilla: tendrán que enfrentarse al Atalanta, Juventus, Hellas Verona y cerrarán la temporada ante el AC Milán, como visitantes.
Estos partidos representan un enorme desafío para el Salernitana, no solo por la calidad de los equipos contrarios, sino también por la presión y el desánimo que puede generar la certeza del descenso. Sin embargo, es precisamente en estos momentos de adversidad donde los equipos tienen la oportunidad de demostrar su carácter y fortaleza. No hay duda que Guillermo Ochoa y sus compañeros de equipo darán todo en el campo para cerrar esta difícil temporada con la mayor dignidad posible.
Por su parte, los aficionados del Salernitana deben estar sintiendo un amargo sabor de boca. Ver a su equipo descender a una categoría inferior es sin duda un golpe duro. Pero el fútbol es así, un deporte de altos y bajos, de victorias y derrotas. Y aunque el panorama actual es gris para el equipo, los seguidores del Salernitana seguro que mantendrán la esperanza de ver a su equipo resurgir y volver a la Serie A en la próxima temporada.
Lo que sí es seguro es que, independientemente de la categoría en la que juegue, el Salernitana seguirá contando con el apoyo de su afición. Y en cuanto a Guillermo Ochoa, este descenso no empaña su trayectoria como uno de los porteros más reconocidos de México. Seguro que seguirá dando lo mejor de sí mismo en cada partido, sin importar las circunstancias.