El Consejo de Seguridad de la ONU ha dado un paso significativo hacia la resolución de la crisis en Gaza, aprobando una propuesta de alto el fuego presentada por Estados Unidos. Con 14 votos a favor y una abstención, la de Rusia, el plan ha recibido un impulso significativo después de casi dos semanas de negociaciones fallidas. Antony Blinken, el secretario de Estado estadounidense, anunció la solicitud al Consejo de Seguridad en el inicio de su octava gira por Oriente Próximo, en un intento de lograr una pausa en la guerra que permita la liberación de los 116 rehenes que siguen cautivos en manos de Hamas.
El portavoz de la misión de EEUU en la ONU, Nate Evans, destacó que Israel había aceptado la propuesta y que el Consejo de Seguridad tenía la oportunidad de pedir a Hamas que hiciera lo mismo. Según la propuesta, la implementación del acuerdo permitiría un alto el fuego inmediato, la liberación de los rehenes, la retirada de las fuerzas israelíes de las zonas pobladas en su primera fase, la entrada de asistencia humanitaria y la elaboración de una hoja de ruta para la resolución completa de la crisis.
La aprobación de esta propuesta llega después de que Rusia vetara una propuesta anterior de Estados Unidos para detener la guerra. Estados Unidos también vetó tres propuestas de resolución que solicitaban un alto el fuego inmediato anteriormente.
El presidente estadounidense, Joe Biden, propuso este plan de tregua hace diez días, que contempla un alto el fuego de seis semanas con la intención de que el cese de hostilidades se vuelva permanente y se pueda reconstruir la Franja con ayuda internacional. La supervisión del cumplimiento del acuerdo correrá a cargo de Qatar y Egipto, países mediadores desde el inicio de la guerra en octubre.
La propuesta ha sufrido varias modificaciones a petición de Israel antes de ser presentada a los 15 miembros del Consejo de Seguridad. Un cambio notable es que la tregua continuará después de las seis semanas propuestas por Biden y se renovará mientras continúen las negociaciones.
Las negociaciones no han estado exentas de obstáculos. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha abogado por continuar con la guerra hasta acabar con Hamas, mientras que ministros de extrema derecha han amenazado con provocar un colapso del gobierno si el acuerdo avanza.
A pesar de la resistencia, el rescate de cuatro rehenes con vida en Gaza en una operación del ejército israelí ha dado alas al gobierno de Netanyahu para continuar con la ofensiva y liberar al resto de los rehenes sin necesidad de un acuerdo de tregua. Hamas, por su parte, ha insistido en que está abierto a cualquier iniciativa de tregua, aunque no ha aceptado públicamente la propuesta estadounidense.
Sami Abu Zuhri, alto funcionario de la organización palestina, ha pedido a la Administración estadounidense que presione a Israel para detener la guerra en Gaza. Por otro lado, Blinken ha instado a los gobiernos de la región a presionar a Hamas para aceptar el alto el fuego antes de reunirse con los líderes de Egipto, Israel y Qatar para llegar a un acuerdo, que aún no cuenta con ningún apoyo formal.