Euromarina II: El Sueño de Vivir Frente al Mar se Transforma en Pesadilla
Hace 17 años, en el sector de Reñaca en la comuna de Viña del Mar, emergía en el horizonte el prometedor edificio Euromarina II, una construcción que prometía ser un paraíso de relajación y entretenimiento frente al mar. Hoy, ese sueño se ha desvanecido, dejando en su lugar una pesadilla que ha afectado a decenas de propietarios.
El edificio Euromarina II, ubicado en el sector de Cochoa en Reñaca, fue promocionado en su momento como un emprendimiento inmobiliario de lujo. Un video del programa Pabellón de la Construcción, dedicado a la promoción de proyectos inmobiliarios en Chile, describía a Euromarina II como un lugar con «espectacular vista al mar», que ofrecía «descanso y entretención» en amplios departamentos de uno a tres dormitorios y home estudios. También se destacaba su moderno y completo equipamiento, que incluía piscinas exteriores y temperada interior, sauna, gimnasio, lavandería, sala de juego, cafetería y cómodos accesos por exclusivos funiculares.
Sin embargo, el pasado sábado 8 de junio, un intenso sistema frontal dejó al descubierto una realidad muy distinta. Un enorme socavón se abrió en el terreno, obligando a la evacuación indefinida de cerca de 60 personas de 87 departamentos. Una transformación radical para el lugar que se promocionaba como «el lugar ideal para disfrutar de la diversión y el relajo del mar todos los días del año».
El Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) informó que el socavón tiene dimensiones cercanas a los treinta metros de profundidad y quince metros de longitud. De manera preliminar, se ha mencionado que el socavón fue generado a raíz del colapso de un colector de aguas lluvias, aunque también se están considerando otras hipótesis, como la filtración de las piscinas del edificio.
Este incidente ha llevado a cuestionar las responsabilidades y decisiones que se tomaron en la construcción del edificio. La Ministra de Obras Públicas, Jessica López, señaló: “Lo primero es ver la causa de este desastre y luego ver cómo se resuelve. Este es un edificio que se construyó en un campo dunar, hay que llamar la atención sobre eso y cuál es la responsabilidad de construir sobre estos campos dunares».
El caso de Euromarina II es un claro ejemplo de cómo las decisiones tomadas en el pasado pueden tener repercusiones significativas en el presente y el futuro. La construcción de este edificio en un campo dunar, y las posibles negligencias que llevaron al colapso del colector de aguas lluvias, han dejado a decenas de personas sin hogar y con un futuro incierto.
Es fundamental que se investiguen a fondo las causas de este incidente, no sólo para determinar las responsabilidades y compensaciones correspondientes, sino también para aprender lecciones que puedan evitar que este tipo de desastres se repitan en el futuro. La construcción en zonas de riesgo, la falta de mantenimiento adecuado y la negligencia en la gestión de proyectos inmobiliarios pueden tener consecuencias catastróficas.
En este sentido, es necesario recordar que el desarrollo inmobiliario no sólo implica la construcción de edificios y viviendas, sino también la gestión responsable y sostenible del territorio. Es fundamental que se tomen en cuenta factores como la idoneidad del terreno, los posibles riesgos naturales y las necesidades y derechos de los habitantes.
La promesa de Euromarina II era ofrecer una vida de ensueño frente al mar. Hoy, esa promesa se ha desvanecido, dejando en su lugar un enorme socavón y muchas preguntas sin respuesta. La lección que deja este incidente es clara: la gestión responsable y sostenible del territorio es fundamental para garantizar la seguridad y la calidad de vida de las personas.
