En el mundo de los vehículos con tracción en las cuatro ruedas, no siempre es necesario un motor de gran tamaño para tener un rendimiento excepcional. Sin embargo, hay algunos monstruos del todoterreno que se destacan por sus motores enormes y muchos cilindros. Uno de esos ejemplos notables es el Mercedes Clase G en sus versiones AMG, que utiliza un motor V8 y ha llegado incluso a tener un motor V12. Asimismo, el Land Rover Defender en sus versiones V8 se prepara para presentar una versión OCTA, que se espera alcance los 635 CV de potencia.
Pero lo que nos presenta el video de hoy es algo completamente diferente. Algo que sólo podría entenderse en la cultura automovilística estadounidense, algo tan exagerado como una hamburguesa extra-size XXL con un litro y medio de refresco de cola. Hoy nos adentramos en el mundo de los todoterrenos con un motor V10 de 8 litros, un consumo de 56 litros/100 kilómetros, y diversión 100% garantizada.
La idea de crear una de las preparaciones todoterrenos más bestias posibles provino de un entusiasta del automovilismo. Decidió que un Dodge Viper de finales de los noventa, con su motor V10 de 8 litros, sería una excelente base para crear un todoterreno. Y así nació esta obra maestra de la ingeniería automovilística.
El responsable de esta creación es Matt Brown, Ingeniero de Automoción, que no ha dudado en compartir su obra maestra en su canal de Youtube. No sólo nos muestra el resultado final, sino también el proceso de preparación que ha seguido. Su proyecto fue transformar un Dodge Viper en un todoterreno, documentar todo el proceso y mostrarnos el resultado.
Brown instaló un diferencial trasero bloqueable donado de un Jeep Wrangler Rubicon y una botonera para activarlo, diseñada a medida, ocupando el espacio del cenicero. Lamentablemente, no dispone de reductora. Las suspensiones fueron diseñadas a medida, y se incluyeron neumáticos All-Terrain. Entre las futuras modificaciones, planea instalar un soporte exterior para portar dos ruedas de repuesto en la parte trasera.
En el vídeo de las primeras pruebas que ha llevado a cabo para comprobar sus capacidades en diferentes entornos, se aprecia que este Viper todoterreno puede enfrentarse a pistas de tierra y arena, saltos y subidas de arena y algunas rocas, por un camino roto. Las pruebas superadas por este Viper todoterreno parecen accesibles para cualquier 4×4 que se precie de serlo.
No cabe duda de que este vehículo es un verdadero monstruo del todoterreno. Ahora bien, ¿qué es más divertido, un todoterreno que lo haga todo fácil, o disfrutar con una máquina tan especial como esta, creada a tu gusto, aún sabiendo que fuera del asfalto tus consumos se van a ir hasta los 56 litros/100 kilómetros? Eso queda a criterio de cada uno.
En definitiva, el Viper todoterreno es una proeza de la ingeniería que demuestra la versatilidad y la potencia de los vehículos todoterreno. Aunque el consumo de combustible puede ser un inconveniente para algunos, para otros, la emoción y la adrenalina de conducir un vehículo de estas características compensan con creces. Sin duda, este proyecto es un fiel reflejo de la pasión por los automóviles y la innovación, características inherentes al espíritu estadounidense.