La alcaldesa Yolanda Sánchez de Cotija, en el estado de Michoacán, México, fue asesinada a tiros a las afueras de un gimnasio en el centro de su municipio. El hecho ocurrió el lunes por la noche cuando la edil y su escolta fueron atacados por sicarios que dispararon al menos 19 impactos de alto calibre, lo que acabó con la vida de ambos.
El asesinato de la alcaldesa es un duro golpe para el país que recientemente celebraba el histórico triunfo de Claudia Sheinbaum, la primera presidenta de México y de toda Norteamérica (incluidos Estados Unidos y Canadá) en 200 años de Historia. Este acto de violencia parece ser una respuesta brutal del crimen organizado, que conoce muy bien cómo marcar su territorio con sangre y muerte.
Las calles de Cotija, un municipio ubicado más de seis horas al sur de la capital, lucieron desoladas durante todo el día después del asesinato. Los agujeros provocados por los balazos se veían claramente en la pared de un colegio colindante, junto a la iglesia más grande del municipio. Medios locales atribuyen el asesinato a «Los Calaveras«, uno de los grupos que forman parte del Cartel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Yolanda Sánchez, militante del Partido de Acción Nacional (PAN), el mismo que el de la candidata opositora Xóchitl Gálvez, había sufrido un secuestro por parte del CJNG hace nueve meses. Durante 48 horas, la mantuvieron cautiva sin exigir dinero, solo buscaban que se cumplieran sus demandas políticas, entre las que destacaba el control de la policía local. Tras su liberación, la alcaldesa regresó en autobús a su hogar y advirtió: «Me han dado una segunda oportunidad«.
Michoacán, el estado natal del futbolista Rafa Márquez y actual entrenador del Barça B, sufre constantemente el azote del narcotráfico. Desde que Andrés Manuel López Obrador asumió la presidencia hace menos de seis años, se han registrado más de 180.000 homicidios en México. El llamado Corredor de la Muerte michoacano, en el que se encuentra Cotija, es una zona disputada por el CJNG y los Pájaros Sierra.
La campaña electoral cerró con 40 asesinatos, lo que la convierte en la campaña más sangrienta de la historia de México. Los narcos parecen cambiar su estrategia y ahora buscan hacerse con el control político y policial de pequeños municipios.
La alcaldesa Sánchez, licenciada en Derecho, solía compartir en su cuenta de Facebook las excelencias de «mi pueblo mágico», ya fuera a través del queso local (ganador en el pasado del Campeonato Mundial de Quesos) o con la compra de artesanías. «Soy una mujer orgullosamente cotijense, de lucha constante y que conoce las necesidades de la gente«, solía presumir en sus redes sociales.