En un reciente desarrollo en la provincia argentina de Misiones, el Frente de Trabajadores en Lucha (FETEL) ha rechazado de manera unánime la propuesta del gobierno del gobernador Passalacqua en respuesta a sus demandas laborales y de compensación. La decisión fue anunciada en una conferencia de prensa posterior a una reunión llevada a cabo en Eldorado, donde se congregaron diversos representantes de FETEL, que actualmente mantienen acampes y cortes a lo largo de la provincia.
El rechazo de la oferta del gobierno refleja la creciente insatisfacción y descontento entre los trabajadores, que acusan al gobierno de falta de voluntad política para resolver sus demandas. El Secretario General de MPL, Ruben Ortiz, y otros miembros del FETEL criticaron duramente la propuesta del gobierno, alegando que era insuficiente y que no abordaba sus preocupaciones de manera adecuada.
Los representantes del FETEL también aprovecharon la oportunidad para denunciar lo que perciben como una creciente criminalización de la protesta y la judicialización de activistas y referentes docentes. Aseveran que varios de sus miembros han sido objeto de descuentos y otras medidas punitivas por parte de la patronal debido a su participación en las protestas.
A pesar del rechazo a la propuesta del gobierno, FETEL ha reafirmado su compromiso de continuar con sus acciones de protesta, que incluyen cortes de ruta y acampes. En el momento de la redacción de esta noticia, un corte significativo se mantiene en la Ruta 12 en Eldorado, donde los docentes están informando a la comunidad acerca de los acontecimientos recientes y discutiendo la continuación de sus medidas de lucha.
El apoyo popular para las acciones de FETEL ha sido considerable, con familias, estudiantes y otros trabajadores respaldando sus demandas y su lucha por una compensación justa. Este respaldo ha obligado al gobierno a sentarse a negociar con FETEL y reconocerlo como un interlocutor válido.
Sin embargo, el gobierno de Passalacqua ha respondido a la protesta con una campaña de desinformación y provocación, difundiendo a través de sus redes sociales un supuesto acuerdo salarial con la burocracia sindical. Se percibe que estas acciones podrían ser un intento del gobierno de preparar una situación represiva para poner fin al conflicto.
El deterioro de la educación pública en la provincia de Misiones ha sido un tema de preocupación durante muchos años, y la falta de acción significativa por parte del gobierno ha sido una fuente de frustración para muchos. Los docentes, respaldados por FETEL, han sido particularmente críticos con el gobierno, acusándolo de negligencia y de no tomar medidas suficientes para mejorar la calidad de la educación.
En un giro preocupante, los gremios burocráticos como UDPM-CTERA han firmado el acuerdo propuesto por el gobierno sin consultar a sus miembros. Esta acción ha sido fuertemente criticada por FETEL y otros, quienes acusan a estos gremios de actuar en interés propio y no en el de los trabajadores a los que representan.
En un movimiento similar, otros gremios afiliados a la CGT, como UDA, AMET y SADOP, también han firmado la propuesta del gobierno sin consultar previamente a sus bases. Esta acción ha sido vista como una traición por parte de muchos, y ha alimentado la creciente desconfianza hacia estos gremios.
A medida que el conflicto continúa, los trabajadores y los miembros de FETEL están decididos a mantener su lucha hasta que se aborden sus demandas de manera adecuada. Con los acampes y los cortes de ruta que continúan, y con un apoyo popular cada vez mayor, el gobierno de Passalacqua se enfrenta a una creciente presión para resolver el conflicto de manera justa y equitativa.