El Secretario General de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Jens Stoltenberg, ha reafirmado enérgicamente el derecho de Ucrania a defenderse de la agresión de Rusia. En una declaración realizada en la capital de la República Checa, Praga, Stoltenberg ha insistido en que Ucrania tiene pleno derecho a atacar objetivos militares en territorio ruso en defensa propia. Según Stoltenberg, muchos aliados de la OTAN han expresado su aprobación de que Ucrania utilice las armas que ha recibido para defenderse, incluso atacando objetivos militares dentro de Rusia.
La situación en el este de Ucrania es crítica, ya que Rusia ha abierto un nuevo frente de batalla y está asediando Járkov, una ciudad ucraniana. Ante la creciente presión de varios aliados de la OTAN y de Kiev, Estados Unidos ha permitido que Ucrania ataque la artillería, las bases de misiles y los centros de mando en territorio ruso utilizando las armas que se le proporcionan. Esta decisión de Washington es un cambio significativo en la política de apoyo a Ucrania que ha mantenido el mayor aliado de la OTAN.
Además, la ministra de Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, ha insinuado que su país también respalda que el ejército de Kiev utilice armamento alemán contra las líneas rusas que lanzan ataques contra Ucrania. Según Baerbock, el derecho internacional es claro en este sentido: los ataques pueden ser repelidos. Otros países como Francia, Reino Unido y Polonia ya permiten a Ucrania atacar objetivos militares en Rusia y líneas logísticas con el material que le suministran.
No obstante, otros aliados como Italia se han manifestado en contra. No está claro si el tipo de material que Italia suministra sería efectivo para este tipo de ataques. El ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, ha subrayado que el uso del material español, que es en su mayoría defensivo, contra las tropas del Kremlin en Rusia no está sobre la mesa porque Kiev no lo ha solicitado.
Mientras tanto, Ucrania y sus aliados se preparan para una guerra larga. Tras el fracaso de la contraofensiva del año pasado, Kiev ha perdido la iniciativa, que ahora mantiene Rusia. Rusia, además, ha preparado su economía para la guerra. Por ello, la OTAN está preparándose para consolidar medidas de apoyo económico, político, diplomático y militar a medio y largo plazo para Ucrania. Estas medidas se formalizarán en la cumbre de Washington en julio, donde la Alianza no emitirá una invitación formal a Kiev para que entre en la organización, pero señalará que su camino hacia ella es «irreversible».
El apoyo a Ucrania busca ser a prueba de retos como la posible vuelta a la presidencia estadounidense de Donald Trump. La OTAN y sus aliados están mostrando su solidaridad con Ucrania y su compromiso con el derecho internacional en respuesta a la agresión militar rusa. La situación en Ucrania es un tema de interés mundial que requiere una atención constante y una acción decidida de la comunidad internacional para garantizar la paz y la seguridad.
