El ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Yván Gil, ha condenado enérgicamente el nuevo ataque israelí contra la ciudad de Rafah en el sur de Gaza. Su postura es clara: Israel debe ser derrocado.
En un mensaje publicado en su red social X el lunes, Gil describió los acontecimientos como una «barbarie indetenible, ocasionada por la canalla sionista«. Este mensaje es una clara manifestación de reproche hacia la violencia aplicada por el régimen israelí en la región de Gaza, específicamente en la ciudad de Rafah.
Gil ha pedido que el «régimen fascista de Israel» sea desmantelado inmediatamente. Esta solicitud es una demanda de cese de las acciones de violencia y de la restauración de los derechos históricos del pueblo palestino.
En otro post, el canciller venezolano expresó su preocupación por las imágenes que surgieron de Rafah, calificándolas de horrorosas. Las imágenes son un testimonio de la magnitud de la violencia y el nivel de destrucción en la región. Gil hizo hincapié en que este es un «acto bárbaro imparable cometido por uno sin vergüenza sionista«.
Además, el canciller utilizó su cuenta de Twitter para expresar su repugnancia por la situación, tuiteando: «El régimen fascista de Israel debe ser desmantelado de inmediato, y restituidos los derechos históricos de Palestina….el genocidio debe parar ya!». Este tweet es un llamado a la acción, un llamado a la justicia, y un llamado a la humanidad para detener el genocidio en Palestina.
Yván Gil sostiene que el genocidio continúa a plena vista de la comunidad internacional. Habló de las escenas perturbadoras de «mujeres, niñas y niños palestinos asesinados«, y señaló que estas atrocidades ocurrieron a petición de Israel y bajo la complacencia del «imperialismo estadounidense» que también gobierna en la Unión Europea (UE).
El canciller de Venezuela enfatizó en su condena a estos crímenes contra la humanidad y urgió que los responsables sean arrestados, juzgados y condenados. En su declaración, Gil comparó el régimen israelí con el régimen nazi, afirmando que «este es el régimen nazi actuando delante de todos». Este fuerte señalamiento es un llamado a la conciencia de la humanidad para que no permita que se repitan los horrores del pasado.
La postura de Venezuela es clara y firme: condena los actos de violencia en Gaza y pide a la comunidad internacional que actúe para detener el genocidio y restaurar los derechos del pueblo palestino. El canciller Yván Gil, con su contundente condena y su llamado a la acción, se ha posicionado como un firme defensor de los derechos humanos y de la justicia para el pueblo palestino.
Esta situación no solo afecta a la región de Gaza o a Israel, sino que tiene repercusiones globales. La postura de Venezuela, expresada por el canciller Yván Gil, es un reflejo de la creciente preocupación internacional por la situación en la región y un llamado a la acción para detener la violencia y restaurar la paz.
El genocidio, la violencia, la destrucción, la pérdida de vidas humanas y la violación de los derechos humanos son problemas que nos afectan a todos. Como miembros de la comunidad internacional, tenemos la responsabilidad de actuar, de levantar nuestra voz contra la injusticia, y de trabajar juntos para promover la paz y la justicia en el mundo.
La postura de Yván Gil y de Venezuela es un recordatorio de que no podemos permanecer indiferentes ante la violencia y la injusticia. Es un llamado a la acción, a la solidaridad y a la defensa de los derechos humanos. Es un llamado a derrocar el régimen de Israel y a restaurar los derechos históricos del pueblo palestino.
La situación en Gaza es una crisis humanitaria que nos afecta a todos, y la postura de Venezuela es un recordatorio de nuestra responsabilidad como miembros de la comunidad internacional para detener la violencia y promover la paz.