El mundo de los smartphones está en constante evolución, y el cambio más reciente se espera que provenga de Google. Todavía falta más de un año para la llegada de los Pixel 10, pero ya se están preparando importantes avances que podrían cambiar el panorama de los teléfonos móviles.
La próxima generación en la mira es la compuesta por la generación Pixel 9, cuyo debut se espera para octubre. Esta generación se completará en mayo del año que viene con el Pixel 9a. Los rumores y filtraciones apuntan a que este año tendremos una generación especialmente amplia, con nada menos que cuatro modelos: Pixel 9, 9 Pro, 9 Pro XL y 9 Fold. A estos se sumará el 9a el año que viene, para un total de cinco modelos con sus diversas variantes.
Estos nuevos smartphones de Google prometen sacar el máximo partido a todas las novedades que llegarán de la mano de Android 15, una actualización que, por lo que hemos podido ver hasta el momento, también resulta prometedora. Sin embargo, parece que en la cocina de Google ya se está preparando un cambio que resultará todavía más relevante, y que salvo cambios, llegará con la siguiente generación, es decir, con los Pixel 10.
Hasta la llegada de la generación Pixel 6, Google había empleado SoCs de terceros, principalmente de Qualcomm. Pero con el debut de los chips Tensor, Google comenzó a confiar el rendimiento de sus smartphones a un diseño de sus propios ingenieros. Sin embargo, Google no cuenta con la capacidad para producir sus propios chips. Hasta ahora, ha sido Samsung quien se ha responsabilizado de la producción de los mismos.
No obstante, parece que esta colaboración pronto llegará a su fin. Según Android Authority, han aparecido referencias a que Google encargará a TSMC la producción del SoC Tensor G5 para los Pixel 10. Este cambio podría marcar una diferencia importante tanto en términos de rendimiento como de eficiencia, ya que se sabe que actualmente Samsung no ha logrado alcanzar el nivel de calidad final proporcionado por TSMC.
La información a la que se refiere esta publicación es una base de datos de importación y exportación. En ella se ha detectado una primera unidad del futuro chip que motorizará los Pixel 10. Esta referencia identifica el chip por su nombre en clave, «Laguna», su número de revisión, A0, y que para su encapsulado se empleará InFO POP, la misma tecnología empleada para los Apple A17.
Desde la llegada de los SoC Tensor, los dispositivos Pixel se han destacado por un excelente trabajo de optimización. Sin embargo, su rendimiento bruto se sitúa por debajo del que proporcionan los topes de gama de otros fabricantes. Las limitaciones de Samsung, como factoría de producción de chips, sin duda han jugado un papel en esto.
Dicho esto, si los equipos de ingeniería de Google y de TSMC se esmeran, lo cual es de esperar, podríamos ver un notable incremento en el rendimiento de los Pixel 10 con respecto a sus predecesores. Esto seguramente los hará aún más destacables en el competitivo mercado de los smartphones.
En resumen, aunque todavía falta más de un año para la llegada de los Pixel 10, ya se está gestando un cambio significativo. Con la producción de sus propios chips y la colaboración con TSMC, Google podría estar a punto de llevar sus smartphones a un nivel completamente nuevo.