El Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1 ha experimentado un giro inesperado y dramático después de la descalificación de los dos pilotos de HAAS, Kevin Magnussen y Nico Hülkenberg. Los pilotos, que habían clasificado en la 15ª y 12ª posición respectivamente, ahora tendrán que partir desde los últimos lugares de la parrilla. Este revés se produce después de una sesión de clasificación excepcionalmente disputada en la que dos de los favoritos a la Pole Position, Fernando Alonso y Checo Pérez, fueron eliminados en la Q2.
La razón de esta descalificación se sitúa en el alerón trasero de los monoplazas de HAAS. Durante la inspección técnica posterior a la clasificación, los técnicos descubrieron que ambos vehículos estaban equipados con un alerón trasero de alta carga que violaba las regulaciones de la Fórmula 1. En concreto, las posiciones ajustables del plano superior del alerón excedían el máximo permitido de 85 milímetros según el reglamento.
La escudería estadounidense HAAS había implementado recientemente una nueva especificación de alerón. Este diseño renovado difería del anterior al contar con su mayor espacio en los extremos de las alas y no en el centro, como era el caso con el diseño anterior. Sin embargo, el equipo reconoció su error, admitiendo que no había “entrenado a sus mecánicos para establecer la diferencia según el nuevo diseño”. A pesar de este contratiempo, el equipo sostiene que este error no debería afectar directamente al rendimiento de sus monoplazas.
Con los coches de HAAS descalificados y obligados a partir desde el Pit-Lane, otros pilotos se benefician de la situación. Entre ellos se encuentran Fernando Alonso y Checo Pérez, quienes no habían logrado avanzar a la Q2. Ahora, gracias a la descalificación de los pilotos de HAAS, ganan dos posiciones en la parrilla. En consecuencia, el piloto de Aston Martin, Alonso, comenzará desde la 14ª posición, mientras que el mexicano de Red Bull, Pérez, lo hará desde la 16ª plaza, la cual originalmente era del español.
En un tuit, el equipo de HAAS confirmó la noticia de la descalificación, citando un «incumplimiento técnico» en ambos VF-24s, descubierto en la inspección post-clasificación. Esta noticia ciertamente ha sacudido el panorama del Gran Premio de Mónaco, y pone de relieve la importancia de las estrictas regulaciones técnicas en la Fórmula 1. A pesar de la decepción, el equipo de HAAS tendrá que tomar este acontecimiento como una lección aprendida y centrarse en prepararse para la carrera, a pesar de partir desde los últimos lugares.
La descalificación de los dos pilotos de HAAS demuestra que, en el deporte de la Fórmula 1, cada detalle cuenta y puede tener un impacto significativo en los resultados de una carrera. Los equipos deben estar siempre atentos a las regulaciones técnicas y garantizar que sus vehículos cumplan con todas las especificaciones requeridas. Aunque la descalificación es un golpe duro para HAAS, la carrera aún está por delante, y tanto Magnussen como Hülkenberg tendrán la oportunidad de demostrar su habilidad al volante, sin importar su posición de partida.