El panorama político estadounidense se encuentra actualmente en una encrucijada inusual, ya que el actual presidente, Joe Biden, podría no aparecer en las papeletas en las elecciones presidenciales en el estado de Ohio debido a un conflicto legal. Según el secretario de estado de Ohio, el republicano Frank LaRose, el Partido Demócrata podría no poder presentar a su candidato presidencial en las elecciones de Ohio debido a un problema de plazos.
La ley de Ohio establece que los partidos deben certificar a su candidato presidencial al menos 90 días antes de la fecha electoral del 5 de noviembre. El plazo para esta certificación vence el 7 de agosto, sin embargo, la convención demócrata, donde se espera que se oficialice la candidatura de Joe Biden para la presidencia y a Kamala Harris para la vicepresidencia, se celebrará en Chicago del 19 al 22 de agosto. Esto significa que la certificación de Biden como candidato presidencial demócrata se produciría después de la fecha límite establecida por la ley de Ohio.
Esta situación se contrapone con la del Partido Republicano, cuya convención se celebrará en Milwaukee del 15 al 18 de julio, dentro del plazo legalmente establecido. El Partido Republicano no se enfrenta al mismo problema de plazos que el Partido Demócrata, ya que su convención se celebrará antes de la fecha límite de certificación.
En situaciones similares, los parlamentos estatales suelen aprobar rápidamente una modificación legal para evitar que uno de los candidatos de los grandes partidos quede fuera de la papeleta. Este mes, la Cámara de Representantes de Alabama, bajo control republicano, aprobó por unanimidad una modificación legal para reducir de 82 a 74 días el plazo previo a las elecciones en el que el candidato debe estar designado para poder aparecer en las papeletas.
Ohio es un estado de casi 12 millones de habitantes. Durante muchos años fue considerado un estado púrpura (mezcla del azul demócrata y del rojo republicano) que servía de referencia nacional. Sin embargo, en las elecciones de 2020, a pesar del triunfo de Biden a nivel nacional, Trump ganó en Ohio con una diferencia de ocho puntos.
El Parlamento estatal estaba tramitando una norma para retrasar el plazo de certificación y permitir que Biden se presente a las elecciones. Sin embargo, los republicanos introdujeron en la norma una disposición para vetar donaciones foráneas para iniciativas electorales estatales, algo que los demócratas rechazan. Los republicanos creen que fue la financiación llegada de fuera de Ohio la que permitió que el año pasado se aprobase en referéndum una enmienda constitucional para establecer el derecho al aborto.
Ante este conflicto, la tramitación de la reforma electoral se ha estancado y el presidente de la Cámara de Representantes de Ohio ha anunciado que finalmente no habrá una solución legislativa. Según LaRose, la oferta del Partido Demócrata de presentar una certificación provisional dentro del plazo legal «simplemente no está prevista por la ley».
Los demócratas no se plantean modificar la fecha de la convención. Tienen la posibilidad de emprender un proceso legal para exigir la presencia de Biden en las papeletas o buscar alguna fórmula intermedia para superar el obstáculo. Hacer una proclamación oficial del candidato previa a la convención sería algo sin precedentes.