El regreso triunfal de un parlamentario británico conservador al Parlamento, luego de sufrir una amputación de sus manos y piernas debido a un shock séptico, ha dado la vuelta al mundo. Craig Mackinlay fue ovacionado este miércoles al retornar a su labor parlamentaria, siete meses después de la tragedia que cambió su vida para siempre.
Mackinlay fue llevado de emergencia al hospital en septiembre de 2023 tras sufrir una sepsis, una complicación grave de una infección que puede causar insuficiencia orgánica. Su condición desencadenó un coma inducido durante 16 días, seguido de la amputación de sus cuatro extremidades en diciembre.
El parlamentario describió este evento como un «día emotivo», pidiendo disculpas por romper las reglas parlamentarias al usar zapatillas deportivas, ya que sus zapatos no se ajustaban bien a sus pies ortopédicos, y por no llevar chaqueta debido a la dificultad de adaptarse a sus nuevos brazos.
En una entrevista a la BBC, Mackinlay, de 57 años, se describió a sí mismo como el primer «parlamentario biónico», en referencia a sus prótesis. Recordó que la noche de su hospitalización se acostó temprano, pensando que solo tenía un simple resfriado. Sin embargo, su estado empeoró durante la noche, lo que llevó a su esposa a llamar a los servicios de urgencia.
La gravedad de su condición se hizo evidente cuando, media hora después de su ingreso al hospital, su cuerpo «se puso azul», un efecto secundario del shock séptico. A pesar de que sus posibilidades de supervivencia se estimaban en un 5%, fue trasladado a un hospital de Londres, muy cerca del Parlamento.
Mackinlay apenas recuerda los detalles, pero sí recuerda las discusiones sobre sus extremidades, que se habían vuelto negras y rígidas. El 1 de diciembre de 2023 se llevó a cabo la operación para amputarle sus cuatro miembros.
Al despertar, descubrió su nuevo cuerpo envuelto en vendas. Afortunadamente, los médicos lograron salvar sus extremidades hasta los codos y por encima de las rodillas. A pesar de la situación, afirmó que «se podría decir que tengo suerte».
El diputado, en funciones desde 2015, recibió entonces prótesis para sus piernas y manos. Mackinlay explicó que continuó trabajando como diputado desde la cama del hospital, iniciando su rehabilitación.
El 28 de febrero de 2024, cinco meses después de su shock séptico, comenzó a dar sus primeros pasos sin ayuda. El parlamentario ahora busca concienciar sobre la sepsis, que provoca cada año alrededor de 48.000 muertes en el Reino Unido. También planea presentarse de nuevo por su circunscripción de Kent en las elecciones legislativas previstas para este año.
A través de su experiencia personal, Mackinlay espera sensibilizar a la sociedad y al gobierno sobre la necesidad de prevenir y tratar adecuadamente la sepsis. Al mismo tiempo, su regreso al parlamento es un testimonio de resiliencia y determinación, que sin duda inspirará a muchos en el Reino Unido y en todo el mundo.