Ebrahim Raisi, el presidente de Irán, y su ministro de Exteriores, Amir Abdollahian, han fallecido de manera repentina en un accidente de helicóptero, causando un vacío de poder inmediato en el gobierno iraní. Esta trágica circunstancia ha obligado a las autoridades a nombrar rápidamente figuras interinas que asuman el poder, antes de convocar elecciones presidenciales.
El ayatolá Ali Jamenei, líder supremo del país, ha designado al actual vicepresidente, Mohammed Mojber, como el nuevo presidente interino. Según el artículo 131 de la Constitución iraní, Mojber estará al mando del poder ejecutivo y, en colaboración con los jefes de los poderes legislativo y judicial, tendrá la responsabilidad de organizar la elección de un nuevo presidente en un plazo máximo de cincuenta días.
Mohammed Mojber, nacido en 1955 en la provincia suroccidental de Juzestán, está considerado un político de línea dura y es un allegado cercano al ayatolá Jamenei. Mojber ha estado en el gobierno desde la victoria de Raisi en las elecciones presidenciales de 2021 y ocupaba el cargo de más alto rango entre los doce vicepresidentes del país, teniendo un contacto muy cercano con el fallecido presidente.
El respaldo de Jamenei al nuevo presidente interino se ha hecho evidente desde los viajes de Mojber a Moscú para acordar el suministro de misiles tierra-tierra y drones al ejército ruso en la guerra de Ucrania. Estas visitas, que tuvieron lugar en octubre del año pasado, contaron con una delegación de altos funcionarios de la Guardia Revolucionaria de Irán y del Consejo Supremo de Seguridad Nacional.
Mojber podría presentarse como candidato en las próximas elecciones presidenciales, que deberán convocarse en un plazo máximo de cincuenta días. Sin embargo, hasta el momento no se ha hecho un anuncio oficial al respecto. Antes de su fallecimiento, Raisi era percibido como el principal candidato a suceder al ayatolá Jamenei, un cargo vitalicio. Ahora, los analistas señalan que ante el vacío de poder, el hijo del líder supremo podría asumir el cargo en el futuro.
Mohammed Mojber comenzó su carrera en el sector financiero, trabajando para el banco Sina, una entidad privada centrada en inversiones. Mojber ha ocupado varios cargos en el sector hasta llegar a dirigir Setad, un importante fondo de inversión vinculado al líder supremo. Este fondo fue fundado por el propio líder de la Revolución Islámica, Ruhollah Jomeini, para gestionar propiedades, invertir y generar intereses en diferentes sectores.
Durante su mandato, Mojber desarrolló Barkat, una vacuna contra el coronavirus que, desafortunadamente, no logró tener suficiente éxito para ser implementada en la población ni comercializada con países extranjeros.
En 2010, la Unión Europea incluyó a Mojber en una lista de personas y entidades sancionadas por participar en «actividades nucleares o de misiles balísticos», aunque la sanción fue retirada dos años más tarde. Tras Raisi, Mojber es el segundo presidente del país sobre el que pesan sanciones estadounidenses. El Departamento del Tesoro de EEUU le impuso sanciones poco antes de asumir su cargo de vicepresidente en 2021, por «corrupción y mala gestión sistémica» de Irán.
Tras la muerte de Ebrahim Raisi, el líder supremo ha declarado cinco días de luto en el país. Asimismo, Jamenei ha nombrado a un ministro de Exteriores interino, tras la muerte de Amir Abdollahian. El viceministro de Exteriores y negociador nuclear, Ali Bagheri Kani, ha asumido el cargo diplomático hasta que se celebren elecciones presidenciales. Kani es conocido por ser muy crítico con el acuerdo nuclear firmado en 2015 por la administración del expresidente moderado, Hasan Rohani. Tras el fracaso del pacto, Raisi lo nombró jefe negociador en 2021 para intentar salvar, hasta ahora sin éxito, el acuerdo nuclear.