En medio de la recuperación global de la pandemia de coronavirus, surge una nueva amenaza para la salud pública mundial: la gripe aviar. Los científicos están advirtiendo que las «señales» actuales sugieren que esta podría ser la próxima gran epidemia. La profesora Devi Sridhar, presidenta de salud pública global de la Universidad de Edimburgo (Reino Unido), ha expresado su preocupación sobre este riesgo potencial.
Sridhar advirtió que aún es demasiado pronto para determinar con certeza qué causará la próxima crisis de salud pública a nivel mundial, pero las señales apuntan a la gripe aviar como la candidata más probable. Estas declaraciones fueron recogidas por el periódico Mirror en el que la experta sostuvo que la reciente serie de mutaciones en la gripe aviar sugiere que es mucho más probable que el virus pueda infectar a los humanos «en algún momento».
La gripe aviar, también conocida como influencia aviar, es un tipo de virus que se origina en aves acuáticas salvajes y puede propagarse a aves domesticadas como pollos, pavos y patos. En raras ocasiones, este virus puede saltar de las aves a los humanos, causando enfermedades graves y potencialmente mortales.
La preocupación de Sridhar no solo se basa en su cargo en la Universidad de Edimburgo, sino también en su experiencia durante la pandemia de COVID-19, donde asesoró al Gobierno escocés. Aplicando lo aprendido en la pandemia anterior, ella insta a las autoridades del Reino Unido a prepararse mejor para un posible brote generalizado de gripe aviar.
En un tweet, Sridhar afirmó: «Me preguntaron sobre el riesgo de una futura pandemia en @edbookfest: una es la gripe aviar debido a señales preocupantes de propagación en aves y en mamíferos. Es mejor prepararse que meter la cabeza en la arena y pretender que no existe. Tenemos una vulnerabilidad colectiva global.»
Estas declaraciones subrayan la necesidad de una preparación y respuesta proactiva a las amenazas para la salud. Sridhar cree que los preparativos ahora podrían ayudar a evitar un alto número de muertes en caso de que ocurra lo peor y una versión altamente infecciosa del virus mute y se propague entre los humanos.
La gripe aviar ha sido una preocupación para los organismos de salud pública durante años debido a su potencial para causar una pandemia. Hasta ahora, la mayoría de los casos humanos de gripe aviar se han producido en personas que han tenido contacto cercano con aves infectadas o han visitado mercados de aves vivas. Sin embargo, el virus todavía no ha mutado a una forma que permita la transmisión fácil de persona a persona.
Si la gripe aviar mutara a una forma que pueda transmitirse fácilmente entre humanos, podría tener consecuencias devastadoras. Por lo tanto, es de vital importancia que los gobiernos y las organizaciones de salud estén preparados para responder a esta amenaza.
La preparación para una pandemia puede incluir una serie de medidas, desde la vigilancia y detección temprana de los casos, hasta la preparación de planes de respuesta y recursos de atención médica. También puede implicar la educación pública sobre cómo prevenir la propagación de la enfermedad y la preparación de vacunas y tratamientos.
Las palabras de la profesora Sridhar nos recuerdan que, si bien el mundo aún está lidiando con las consecuencias de la pandemia de coronavirus, no podemos permitirnos ignorar otras amenazas para la salud. La vigilancia continua, la preparación y la respuesta proactiva son esenciales para proteger la salud global. A medida que avanzamos en la recuperación de la pandemia de COVID-19, la preparación para la próxima crisis de salud, sea cual sea su causa, debe ser una prioridad.