El Jefe de Estado chileno, Gabriel Boric, ha hecho un nuevo reconocimiento de sus errores, en esta ocasión relacionado con su uso de las redes sociales durante su tiempo como diputado. Este acto de autocrítica se produjo durante su participación en la presentación del libro “Chile 2050: un país. Cuatro presidentes”, un evento celebrado en la casa central de la Pontificia Universidad Católica.
Además de Boric, en el evento intervinieron personalidades destacadas como el Premio Nobel de la Paz y exmandatario de Colombia, Juan Manuel Santos, junto con representantes de la universidad como su rector, Ignacio Sánchez, la directora de Ediciones UC, María Angélica Zegers, y el director de Clapes UC, Felipe Larraín.
Durante su intervención, Boric no dudó en recordar al fallecido expresidente Sebastián Piñera, quien en su ponencia incluida en el libro, fue crítico con el uso y abuso de las redes sociales. Piñera llegó a afirmar que «la preocupación por la encuesta semanal, cuántos puntos subo, cuántos puntos caigo, y cómo caigo mejor, le ha hecho muy mal también a la democracia».
En esta línea, el actual Presidente de Chile consideró que es crucial que quienes tienen responsabilidades de gobierno y de Estado «seamos capaces de mirar más allá de esa coyuntura semanal, de la tentación del like, de la tentación del retweet». Insistió en que en el panorama actual es común encontrar a «muchos Presidentes en ejercicio que están constantemente peleando y discutiendo a través de redes sociales”.
Reconociendo sus propias prácticas pasadas, Boric admitió: “Yo como diputado era muy bueno para eso”. No obstante, el mandatario chileno aseguró que en su rol de Presidente de la República ha aprendido que las responsabilidades del cargo le obligan “a tener también otra conducta respecto a estos temas”.
Boric subrayó que es consciente de que es el Presidente de todos los chilenos y chilenas y que esa conciencia debe expresarse. En su discurso, Boric se refirió a sus predecesores en el cargo, Patricio Aylwin, Eduardo Frei, Michelle Bachelet y Sebastián Piñera, de quienes dijo haber aprendido mucho. Aseguró que estos four expresidentes «tenían muy claro» la importancia de mantener una conducta adecuada en relación a temas como el uso de las redes sociales.
Este mea culpa de Boric es un reconocimiento de la influencia que las redes sociales pueden tener en la política y la democracia. Es una llamada a la reflexión sobre cómo los líderes políticos deben gestionar su presencia en estas plataformas, haciendo un uso responsable y pensando en el bienestar del país por encima de las ganancias personales a corto plazo. En un momento en que las redes sociales son un medio de comunicación tan poderoso, las palabras de Boric son un recordatorio de las responsabilidades que los líderes políticos tienen con sus ciudadanos.