El Club de la Unión busca reorganización judicial para enfrentar sus deudas y evitar la quiebra

El Club de la Unión, una de las instituciones sociales más emblemáticas de Santiago, ha presentado una solicitud ante el 14° Juzgado Civil de Santiago para iniciar un proceso de reorganización judicial. Esta medida tiene como objetivo permitir la continuidad del negocio a pesar de las deudas millonarias que enfrenta la entidad.

Esta decisión surge después de que el 21 de marzo, dos ex empleados solicitaran la liquidación forzosa de la sociedad, alegando deudas laborales por $180,5 millones. Esta suma, aunque considerable, es solo una parte de los compromisos financieros que enfrenta el Club. A este monto se suman 15 perjuicios civiles por obligaciones que ascienden a $419 millones.

El tribunal accedió a la petición del Club de la Unión, presidido por el empresario Matías Pérez Cruz. El juez ha otorgado un plazo prudencial de cinco días hábiles para que la sociedad presente toda la documentación necesaria, tal como lo establece la ley en estos casos. El objetivo es proporcionar un marco legal que permita al Club reorganizarse y continuar operando, a pesar de su difícil situación financiera.

Esta situación ha llevado a una serie de debates y especulaciones sobre el futuro del Club de la Unión. Actualmente, cuenta con alrededor de 250 socios que están al día con sus cuotas. Sin embargo, algunos se preguntan si esto será suficiente para mantener a flote a la entidad y enfrentar sus deudas.

El Club de la Unión, que ha sido un punto de referencia en la vida social de Santiago durante décadas, se enfrenta a un desafío sin precedentes. La posibilidad de una quiebra ha sido un golpe duro para sus miembros y para la comunidad en general. Sin embargo, la decisión de buscar una reorganización judicial puede ser un primer paso para encontrar una solución a sus problemas financieros.

El proceso de reorganización judicial es una herramienta legal que permite a las empresas en dificultades financieras reestructurar sus deudas y compromisos financieros, con el objetivo de continuar operando. A través de este proceso, el Club de la Unión espera poder encontrar una solución a sus deudas y garantizar su continuidad.

El futuro del Club de la Unión es incierto. La decisión de solicitar una reorganización judicial es un paso importante, pero solo el tiempo dirá si será suficiente para superar sus problemas financieros. Mientras tanto, los miembros del Club y la comunidad en general esperan con ansiedad el desarrollo de los acontecimientos.

La noticia completa sobre la situación del Club de la Unión y su solicitud de reorganización judicial se puede encontrar en la edición de hoy del periódico El Mercurio.