El escenario político chileno se está agitando una vez más, esta vez con las próximas elecciones municipales y de gobernadores regionales que se celebrarán en octubre de este año. En este contexto, se ha hablado de Joaquín Lavín, exabanderado y antiguo alcalde de Las Condes, como posible candidato para la alcaldía de la comuna de Recoleta, un territorio que actualmente está bajo el control del comunista Daniel Jadue.
Esta propuesta, sin embargo, no es aleatoria, sino que forma parte de una estrategia más amplia del partido de derecha encabezado por Javier Macaya. El objetivo es colocar figuras fuertes en áreas emblemáticas que están actualmente en manos de la izquierda. Al parecer, el partido busca recuperar territorio en las áreas controladas por la izquierda, utilizando a personas con un perfil político fuerte y reconocido como Lavín.
Lavín es particularmente atractivo debido a su amplia experiencia política. Fue alcalde de Las Condes en tres periodos y también gobernó la comuna de Santiago entre 2000 y 2004. Además, ha participado en tres elecciones presidenciales, lo que lo convierte en un candidato experimentado y conocido.
La propuesta de Lavín como candidato surge en medio de tensiones en la oposición y negociaciones sobre los candidatos para las próximas elecciones. En particular, el Partido Republicano ha acusado a Chile Vamos de retrasar las decisiones y ha ejercido presión para resolver las candidaturas antes de que expire el plazo legal.
La posibilidad de que Lavín se postule ha generado tensión con los Republicanos. La colectividad fundada por José Antonio Kast ya ha decidido que su secretaria general, Ruth Hurtado, será su candidata para competir por Recoleta. Este movimiento ha provocado malestar en las filas republicanas, ya que consideran a Recoleta como una de las áreas prioritarias en las que pretenden ganar.
El debate sobre la candidatura de Lavín ha generado diversas reacciones. Algunos sugieren que se ha realizado un sondeo para medir la competitividad de Lavín en la zona, mientras que otros descartan tal posibilidad. Independientemente de esto, parece que Macaya ha hablado con Lavín para preguntarle si está dispuesto a competir.
Sin embargo, Lavín ha rechazado rotundamente la idea de postularse. A pesar de su negativa, desde Chile Vamos ven con buenos ojos una posible candidatura de Lavín. Por otro lado, en RN insisten en su candidato, el concejal Felipe Cruz, y abogan por un mecanismo de resolución, como una encuesta, para decidir al candidato.
La UDI, por su parte, insiste en que su candidato para la comuna es Mauricio Smok. Sin embargo, la UDI también está considerando la candidatura de Isabel Plá para la gobernación de la Región Metropolitana y a la secretaria general de la UDI, María José Hoffman, para la gobernación de Valparaíso.
A pesar de las tensiones y las diferencias de opiniones, todos los actores políticos parecen estar de acuerdo en una cosa: el principal objetivo de las próximas elecciones municipales es ganar en aquellos municipios que están actualmente en manos del oficialismo. En este sentido, Recoleta, una comuna fuerte del Partido Comunista, se ha convertido en uno de los principales objetivos de la derecha.
En resumen, la política chilena está en pleno proceso de reorganización de cara a las próximas elecciones. Con la izquierda y la derecha compitiendo por el control de comunas emblemáticas como Recoleta, y figuras políticas como Joaquín Lavín siendo consideradas para liderar la carga, la carrera electoral promete ser intensa y emocionante.