En el ámbito de las tecnologías gráficas y la arquitectura de procesadores, el gigante tecnológico AMD parece estar en una fase de transición, según rumores recientes que indican que su próxima generación de arquitectura, la RDNA 4, será una evolución menor con cambios menores en comparación con la RDNA 3. Este movimiento estratégico, que puede parecer desconcertante a primera vista, se vuelve comprensible si recordamos el precedente establecido por la arquitectura original de RDNA.
Cuando AMD lanzó la arquitectura RDNA, la selección de modelos ofrecidos fue bastante limitada, compuesta únicamente por las Radeon RX 5500 XT, Radeon RX 5600 XT, Radeon RX 5700 y Radeon RX 5700 XT. Aunque abarcaba las gamas más populares y competitivas, no presentó un modelo de gama alta y, en comparación con las GeForce RTX 20, carecía de características clave como el hardware especializado en IA y el trazado de rayos.
Estas limitaciones, sin embargo, proporcionaron a AMD un margen adicional para desarrollar las tarjetas gráficas Radeon RX 6000 basadas en la arquitectura RDNA 2. Esta generación, considerada una de las mejores de AMD en términos de relación calidad-precio, podría ser un indicativo de lo que vendrá con las futuras generaciones RDNA 4 y RDNA 5. Se espera que RDNA 4 siga un patrón similar al de la RDNA original, mientras que RDNA 5 marcará un gran avance, tal como lo hizo RDNA 2 en su momento.
La RDNA 4 probablemente presentará mejoras en el rendimiento y la eficiencia, pero se seguirá considerando una generación de transición que, según las últimas informaciones, no contará con un modelo de gama alta. La potencia adicional en esta generación puede provenir de mejoras en el rendimiento del trazado de rayos, aunque aún no se ha confirmado nada oficial.
El verdadero avance se espera con la arquitectura RDNA 5, que será una arquitectura completamente nueva desarrollada desde cero. Esta arquitectura supuestamente traerá cambios radicales que mejorará el rendimiento en todos los aspectos y también la eficiencia energética.
La expectativa en torno a la RDNA 5 también se centra en si AMD optará por una GPU con diseño MCM (módulo multichip) o si mantendrá un diseño de núcleo monolítico con la caché L3 externalizada en chiplets, como se vio en la RDNA 2 y RDNA 3. Hay que tener en cuenta que las primeras tarjetas gráficas basadas en RDNA 5 no se lanzarán hasta finales de 2025 o mediados de 2026.
En medio de todos estos cambios y mejoras, la IA también está jugando un papel cada vez más importante en el sector de la tecnología gráfica. Las imágenes generadas por la IA, por ejemplo, están ganando terreno y se espera que esta tendencia continúe en el futuro.
Así, a medida que AMD se prepara para lanzar las próximas generaciones de su arquitectura gráfica, los espectadores y usuarios pueden esperar mejoras significativas en términos de rendimiento, eficiencia energética y capacidades de IA. Sin embargo, como siempre, la realidad de estas promesas solo se revelará con el tiempo y el lanzamiento efectivo de estos productos.