El miércoles pasado, la capital de Uruguay, Montevideo, se convirtió en el escenario de una congregación de ciudadanos uruguayos que protestaban ante la embajada de Israel. Los manifestantes gritaban consignas como “No es una guerra es genocidio” y “Los niños en Gaza no son una amenaza”, una clara denuncia a las acciones del régimen israelí en el conflicto palestino-israelí.
El motivo de esta congregación fue el Día Internacional de Solidaridad con los Presos Políticos Palestinos, una jornada en la que se busca aumentar la conciencia global sobre la situación de los detenidos palestinos. Entre los reclamos de los manifestantes, se encontraba el pedido por el fin del genocidio israelí y la liberación de presos palestinos.
Esta manifestación no es un hecho aislado, sino que se enmarca en un contexto global de protestas contra las acciones de Israel en territorio palestino. En este sentido, los ciudadanos argentinos tienen previsto organizar este jueves una movilización en defensa del pueblo palestino y en denuncia del genocidio que se está perpetrando.
El conflicto palestino-israelí ha llegado a un punto crítico desde el pasado 7 de octubre, cuando Israel lanzó una guerra genocida contra la Franja de Gaza. Desde entonces, se estima que han muerto cerca de 34 000 palestinos, la mayoría de las víctimas son mujeres y niños.
El término guerra genocida utilizado por los manifestantes, hace referencia a la estrategia de exterminio sistemático utilizada por el régimen israelí. Esta estrategia, según denuncian, tiene como objetivo eliminar a la población palestina, en su mayoría compuesta por civiles indefensos.
Los manifestantes uruguayos y argentinos son solo una muestra de la indignación y la solidaridad que sienten muchas personas alrededor del mundo con el pueblo palestino. Las protestas y las movilizaciones son una forma de hacer visible este conflicto, que a menudo queda relegado en los medios de comunicación.
En medio de esta situación, los presos políticos palestinos son una de las caras más visibles de la injusticia. Son personas que han sido arrestadas por Israel, a menudo sin un juicio justo, y que sufren condiciones inhumanas en las cárceles.
La liberación de los presos palestinos es uno de los reclamos más recurrentes en las protestas. Muchas de estas personas son consideradas como héroes por su pueblo, ya que han luchado por la libertad y la autodeterminación de Palestina.
El genocidio israelí, como lo califican los manifestantes, es una realidad que necesita ser visibilizada y condenada por la comunidad internacional. Se necesita una solución urgente y justa para este conflicto, que ha costado la vida de miles de personas y ha causado sufrimiento inimaginable a la población palestina.
En resumen, los ciudadanos uruguayos y argentinos, así como muchas otras personas alrededor del mundo, se están uniendo para denunciar las atrocidades cometidas por Israel en la Franja de Gaza y para pedir la liberación de los presos políticos palestinos. La lucha por la justicia y la paz en Palestina es un movimiento global que no se detiene.