El pasado fin de semana, el automovilismo deportivo se deleitó con una carrera espectacular en el Gran Premio de Indianápolis. El protagonista principal fue el español Álex Palou, quien, gracias a su estrategia brillante y un excelente desempeño detrás del volante, logró una victoria contundente para Chip Ganassi Racing.
Palou realizó una increíble transformación de su pole en triunfo al superar a sus competidores más fuertes del día, Will Power y Christian Lundgaard, durante su última parada en boxes y el reinicio posterior. Este último fue provocado por una bandera amarilla causada por Luca Ghiotto. A partir de ese momento, el piloto español estableció un ritmo que resultó inalcanzable para sus rivales.
El inicio de la carrera vio a Palou perder la delantera en la primera vuelta, permitiendo que Lundgaard marcara el ritmo inicial. Sin embargo, la elección de los neumáticos demostró ser crucial en esta etapa de la carrera. Palou optó por neumáticos blandos, mientras que Lundgaard y Power eligieron los duros. Durante la primera vuelta, un incidente que involucró a varios pilotos, incluyendo a Felix Rosenqvist, Rynus VeeKay y Scott McLaughlin, provocó una reacción en cadena.
El cambio de dinámica se produjo en la vuelta 16, cuando los pilotos con posibilidades de ganar, entre ellos Patricio O’Ward, Will Power, Christian Lundgaard, Alex Palou y Scott Dixon, entraron a boxes para repostar. Esto permitió que Marcus Armstrong tomara la delantera de la carrera.
En la segunda ronda de detenciones, la carrera dio un vuelco cuando el piloto danés Lundgaard fue ralentizado por Kyle Kirkwood y Felix Rosenqvist. Penske, viendo la oportunidad, llamó a Power para realizar el undercut. Sin embargo, los cálculos no salieron como se esperaba, ya que Power salió detrás de Marcus Ericsson, con Lundgaard adelante. Palou, por su parte, entró una vuelta después y salió en primer lugar con neumáticos blandos.
El actual campeón de la IndyCar, Palou, mantuvo a raya a sus rivales Lundgaard, Power y Scott Dixon. Otros pilotos como Marcus Armstrong, Alexander Rossi, Graham Rahal, Linus Lundqvist y Colton Herta intentaban seguir el ritmo, pero la brecha se estaba ampliando. Los cuatro primeros estaban claramente en otro nivel y se anticipaba que la última parada en boxes sería determinante para la victoria.
El momento crucial llegó en la vuelta 62, cuando los cuatro aspirantes al triunfo entraron a boxes. Palou mantuvo su primer lugar, pero Power logró salir por delante de Lundgaard. Dixon, por otro lado, no pudo mejorar su posición. Todos optaron por neumáticos blandos para el stint final.
Todo parecía estar en orden hasta que ocurrió un incidente con Luca Ghiotto que provocó la primera bandera amarilla. En el reinicio, Palou defendió con éxito su liderato y comenzó a alejarse de Power. Dixon logró contener a Marcus Armstrong, mientras que otros pilotos como Scott McLaughlin, Herta, Alexander Rossi, Graham Rahal y Felix Rosenqvist completaron los diez primeros puestos. Desafortunadamente, Josef Newgarden no tuvo un buen desempeño, terminando en el puesto 17, mientras que Théo Pourchaire acumuló experiencia aunque terminó en el lugar 19. De manera similar, Patricio O’Ward tuvo un día desafortunado al terminar en el 13º puesto.
La próxima carrera es una de las más esperadas del año: las 500 Millas de Indianápolis. Con su victoria reciente, Álex Palou llegará a este evento como líder del campeonato, por delante de pilotos de la talla de Will Power, Scott Dixon y Colton Herta.