El gobernador metropolitano de Chile, Claudio Orrego, ha instado al gobierno a priorizar una propuesta de ley que busca otorgar mayores facultades a los gobernadores regionales en cuestiones de seguridad. Esta solicitud surge en un momento de creciente inseguridad y delincuencia en la región y en el país en general.
Orrego dejó claro que su petición no implica que el Ministerio del Interior deba renunciar a su papel de liderazgo en relación con las fuerzas policiales. Su llamado se centra en la necesidad de que a los gobernadores se les permita asumir un papel más activo en la prevención del delito, algo que ya está dentro de las competencias de los municipios. El liderazgo en la prevención del delito es, en su opinión, una responsabilidad que los gobernadores regionales deberían compartir.
Según Orrego, la Subsecretaría de Prevención del Delito es una organización que genera políticas pero no implementa programas. Esto, sostiene, es tarea de las regiones y las comunas. Para que las políticas de seguridad sean eficaces, deben estar arraigadas en el terreno y adaptadas a las necesidades y circunstancias locales.
El gobernador metropolitano abogó por un enfoque más inclusivo y colaborativo hacia la seguridad. Señaló que los gobernadores manejan el presupuesto regional y deberían tener la autoridad para convocar a todos los actores relevantes para abordar la seguridad. Esto no debería hacerse de manera clandestina, sino a través de un mandato legal otorgado por el Congreso.
El proyecto de ley que Orrego defiende actualmente se encuentra en el Congreso. Según él, lo único que falta para su aprobación es la urgencia por parte del gobierno. En este sentido, Orrego instó a la ministra a dar prioridad a la propuesta de ley para que pueda ser aprobada rápidamente.
En cuanto a sus expectativas para la tramitación de la ley, Orrego fue claro: espera que la iniciativa sea aprobada este año. Considera que, dada la crisis de seguridad que vive el país y la importancia que se le ha dado a la agenda de seguridad, es inaceptable que los gobiernos regionales, que controlan los presupuestos regionales, no tengan esta facultad.
Orrego argumentó que si el gobierno realmente quiere que todas las regiones participen en la lucha contra la delincuencia, debe dar prioridad a este proyecto de ley. Según él, los gobiernos regionales ya están trabajando sin una ley que les otorgue estas facultades, y con una ley podrán trabajar mucho mejor.
Esta iniciativa, considera Orrego, es fundamental para que los gobiernos regionales puedan hacer frente de manera eficaz a la delincuencia y garantizar la seguridad de sus ciudadanos. Una mayor participación de los gobernadores regionales en la prevención del delito no sólo ayudará a aliviar la presión sobre el Ministerio del Interior, sino que también permitirá una respuesta más rápida y adaptada a las condiciones locales.
En resumen, el gobernador metropolitano, Claudio Orrego, ha hecho un llamado al gobierno para que otorgue mayor urgencia a un proyecto de ley que permitiría a los gobernadores regionales asumir un papel más activo en la prevención del delito. La propuesta se encuentra actualmente en el Congreso y, según Orrego, lo único que falta para su aprobación es la urgencia por parte del gobierno. Al otorgar a los gobernadores regionales la autoridad para liderar la prevención del delito, Orrego sostiene que Chile podrá responder de manera más eficaz a su actual crisis de seguridad.
