A las 18.30 horas del lunes 2 de septiembre, los integrantes de las comisiones políticas del Partido Socialista (PS) y el Partido por la Democracia (PPD) llegarán hasta la sede de Santiago del Congreso Nacional para desarrollar una iniciativa que esperaban con ansias: una sesión conjunta de ambas instancias, que permita a los dirigentes de los dos partidos analizar en profundidad el momento que atraviesa el Socialismo Democrático.
La expectativa es alta. Y es que desde ambos partidos aseguran que la invitación está extendida para los ministros y parlamentarios PS o PPD que deseen participar, por lo que se proyecta que la discusión política que se desarrollará será especialmente relevante para fortalecer la sintonía entre las dos tiendas que históricamente han trabajado unidas. Aunque no milita, también fue convocado el canciller, Alberto van Klaveren.
“Nos hemos convocado en este encuentro inédito porque el país y los problemas que estamos enfrentando requieren dar discusiones amplias y reflexiones de bloque, más que solamente encerrarnos en nuestras respectivas colectividades. Las propuestas que emanen del encuentro hablarán del rumbo que el Socialismo Democrático quiere ofrecer a Chile”, afirmó el presidente del PPD, el senador Jaime Quintana.
Anteriormente, ambos partidos trabajaron en el Manifiesto del Socialismo Democrático, un texto publicado en abril de este año que plantea que “somos continuadores de 24 años de gobiernos de centroizquierda y de lo que va de corrido del mandato del Presidente Gabriel Boric: es en esa tradición política en la que nos inscribimos y que reivindicamos con orgullo. Pero somos también realistas en reconocer que la agenda de gobierno de la Concertación, de la Nueva Mayoría y de un gobierno de dos coaliciones (2022-2026) es absolutamente insuficiente para enfrentar el nuevo mundo que se nos viene encima”.
El documento fue redactado por reconocidos dirigentes como Guido Girardi, Ricardo Solari y Andrés Santander.
El encuentro, que es descrito por los militantes como un segundo paso luego del manifiesto, se da en momentos convulsionados para ambas tiendas. Durante las últimas semanas, precisamente desde el PS y el PPD han surgido las voces que se abren a examinar la política de alianzas. En particular, debido a la postura que ha adoptado el Partido Comunista con respecto a Venezuela, sin reconocer que se trata de una dictadura como lo ha planteado el Presidente Gabriel Boric y buena parte del resto del oficialismo.
La tensión escaló a tal punto, que Quintana advirtió, en entrevista con La Tercera, que “si en un plazo prudente el PC no cambia su posición sobre Venezuela, veo muy difícil renovar un pacto con ellos”.
Pero eso no es todo. Ante la negativa de la expresidenta Michelle Bachelet de asumir una nueva candidatura presidencial, los partidos -y particularmente el PS- enfrentan la titánica tarea de encontrar una carta que los represente en los comicios del próximo año. El PPD, en tanto, insiste en presentar como candidata a la ministra del Interior, Carolina Tohá, aunque no logra ascender en las encuestas. Algo que mantiene preocupada a la colectividad.
En paralelo, los partidos están extremadamente preocupados de tener un buen resultado en las elecciones de octubre de este año. Las primarias de junio ya hicieron pasar susto al Socialismo Democrático, puesto que el Frente Amplio y el PC lograron conquistar comunas clave y altamente pobladas. El PPD y el PS comparten lista de concejales, por lo que se prevé que los comicios de este año sean un tema en tabla durante la sesión de las comisiones políticas.
En esta oportunidad, no están convocados el Partido Radical ni el Partido Liberal, colectividades que también forman parte del Socialismo Democrático. En el pasado, cuando se hizo público el manifiesto mencionado, esta exclusión irritó a estas dos tiendas. “Es un esfuerzo del PS y el PPD, no de la coalición”, dijo el líder de los liberales, Juan Carlos Urzúa, en esa oportunidad.
Luego de las primarias de junio, las cuatro colectividades tenían planeado desarrollar un cónclave que convoque a las comisiones políticas de cada partido ese mismo mes. Sin embargo, la iniciativa no prosperó. (La Tercera)