Fernando Jara: Una Caminata de Esperanza para su Hijo Dante
Fernando Jara, padre del pequeño Dante, ha llegado al Congreso Nacional después de una travesía de 99 días caminando desde su natal Arica. Su objetivo es reunir $3.500 millones para el tratamiento de su hijo, quien padece Distrofia Muscular de Duchenne.
Al llegar a Valparaíso, Jara explicó que “si no hago nada, Dante tendrá complicaciones de salud, ya sea cardíacas, respiratorias o estará en silla de ruedas”.
Fernando recordó que “hoy son 99 días que vengo caminando desde Arica para visibilizar la enfermedad y recibir la ayuda de un país completo. He tenido que dejar mi vida por completo”.
Distrofia Muscular de Duchenne
El padre de Dante explicó que esta caminata es para enfrentar la Distrofia Muscular de Duchenne y busca incluir “a todos los padres y madres para que no tengan que vivir esto. Pido el apoyo a un pueblo, porque no quiero que Dante muera o verlo empeorar”.
Consultado sobre el monto reunido, detalló que solo lleva el 24% de la meta que necesita, lo que equivale a $868 millones.
“Necesitamos hacer todo esto visible, como papá estoy mal. La he sufrido harto, Dante tiene 2 años, tiene todo por delante”, sentenció Fernando Jara, consignó 24 Horas.
La Distrofia Muscular de Duchenne es una enfermedad genética que afecta principalmente a los niños. Se caracteriza por la pérdida progresiva de la fuerza muscular, lo que eventualmente lleva a complicaciones severas en el corazón y los pulmones. No existe una cura definitiva, pero hay tratamientos que pueden mejorar la calidad de vida y prolongar la esperanza de vida de los afectados.
Fernando Jara inició su caminata desde Arica con la esperanza de recaudar fondos y concienciar a la sociedad sobre esta enfermedad. Durante su travesía, ha recibido apoyo de diversas personas y organizaciones, pero aún está lejos de alcanzar su meta económica. La caminata no solo busca fondos, sino también visibilizar una condición que afecta a muchas familias en Chile y en el mundo.
En su recorrido, Fernando ha enfrentado diversos desafíos, desde el cansancio físico hasta la incertidumbre de no saber si logrará su objetivo. Sin embargo, su determinación y amor por su hijo lo han mantenido firme en su propósito. “Cada paso que doy, lo hago pensando en Dante y en todos los niños que sufren esta enfermedad”, afirmó.
La historia de Fernando y Dante ha tocado corazones y ha generado una ola de solidaridad. Personas de diferentes regiones del país han seguido su travesía y han contribuido con donaciones. Sin embargo, la cantidad reunida hasta ahora es solo una fracción de lo que se necesita para el tratamiento completo de Dante.
El tratamiento para la Distrofia Muscular de Duchenne es costoso y requiere de múltiples intervenciones médicas, terapias y medicamentos. Además, la enfermedad progresa rápidamente, por lo que el tiempo es un factor crucial. “Cada día que pasa sin el tratamiento adecuado es un día perdido para Dante”, explicó Fernando con preocupación.
A pesar de las adversidades, Fernando no pierde la esperanza y sigue apelando a la solidaridad del pueblo chileno. “Sé que juntos podemos lograrlo. No solo por Dante, sino por todos los niños que luchan contra esta enfermedad”, expresó con firmeza.
La llegada de Fernando al Congreso Nacional marca un hito en su travesía, pero también abre una nueva etapa en su lucha. Ahora, su objetivo es captar la atención de los legisladores y buscar apoyo gubernamental para financiar el tratamiento de Dante y de otros niños con Distrofia Muscular de Duchenne. “Espero que mi esfuerzo sirva de ejemplo y que las autoridades tomen conciencia de la importancia de apoyar a las familias que enfrentan esta enfermedad”, dijo.
La historia de Fernando y Dante es un testimonio de amor, sacrificio y esperanza. Su caminata de 99 días es una muestra de la fuerza y determinación de un padre dispuesto a hacer lo imposible por su hijo. A pesar de los obstáculos, Fernando sigue adelante, convencido de que cada paso que da lo acerca un poco más a su meta.
En un mundo donde a menudo las noticias se centran en aspectos negativos, la historia de Fernando Jara y su hijo Dante nos recuerda la importancia de la solidaridad y el poder del amor. Su travesía es un llamado a la acción y una invitación a unirnos en una causa noble y urgente. Porque, como dice Fernando, “ningún padre debería ver a su hijo sufrir sin poder hacer nada al respecto”.