El Parlamento turco se convirtió en un punto de atención global este viernes, tras una violenta pelea que estalló en su sala de sesiones. Un parlamentario progubernamental atacó a un opositor izquierdista mientras este hablaba desde el estrado, resultando en varios diputados heridos y una diputada que tuvo que ser hospitalizada. Este incidente pone de relieve la creciente tensión política en Turquía y destaca una vez más la división entre los partidos gobernantes y de oposición.
La causa de esta violenta confrontación es Can Atalay, miembro del izquierdista Partido de los Trabajadores de Turquía (TIP). Atalay ganó un escaño en las elecciones del pasado año pero sigue encarcelado acusado de organizar la revuelta de Gezi en 2013. Estas manifestaciones, que comenzaron en protesta por la tala de árboles en un parque de Estambul, desembocaron en un amplio movimiento de disidencia que desafió al gobierno de Erdogan durante semanas.
El Tribunal Constitucional había pedido la liberación de Atalay y la entrega de su acta de diputado, pero su decisión fue ignorada por el Tribunal Supremo, creando así una crisis en el poder judicial del país. En enero, el Parlamento, dominado por los grupos islamistas y ultraderechistas que respaldan al presidente Recep Tayyip Erdogan, aprobó despojar a Atalay de su condición de diputado en una sesión que el Constitucional invalidó y decretó “sin efecto”.
En una escalada de tensiones, el diputado del TIP, Ahmet Sik, realizó un agresivo discurso contra la mayoría gubernamental, acusándola de “no tener vergüenza ni dignidad” por negarse a aplicar las directivas del Constitucional. En respuesta, el diputado del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) de Erdogan Alpay Özalan, exfutbolista del Besiktas, Fenerbahçe y Aston Villa, se levantó y golpeó a Sik en la cara.
Esta no es la primera vez que Özalan se ve involucrado en peleas parlamentarias, a pesar de ser uno de los idari amir del Parlamento, supervisores encargados de mantener el orden en los debates. Tras su ataque, se desató una pelea a golpes, patadas y puñetazos entre parlamentarios de varios grupos, resultando en varios heridos y la hospitalización de la vicepresidenta del grupo de izquierda prokurda, Gülistan Koçyigit.
El jefe del principal partido de la oposición, Özgür Özel, calificó el incidente de “vergonzoso” y pidió al presidente del Parlamento, el islamista Numan Kurtulmus, que convoque “de urgencia” a los líderes de los partidos políticos para discutir la situación. Este incidente, y la respuesta del gobierno, podría tener importantes repercusiones en el clima político de Turquía en los próximos meses.
Este reciente incidente en el Parlamento turco pone de relieve las crecientes tensiones políticas y sociales en Turquía, así como la creciente polarización entre el gobierno y la oposición. Los actos de violencia en el lugar que debería ser el corazón de la democracia turca son un llamado de atención sobre los desafíos que enfrenta el país en su camino hacia la estabilidad política y el respeto a los derechos humanos.