El sábado pasado, el mundo del boxeo fue testigo de un regreso muy esperado. Román «Chocolatito» González, el boxeador nicaragüense cuatro veces campeón del mundo, regresó a la acción y como se esperaba, logró una victoria sin dramas frente al rival seleccionado, el colombiano Rober Barrera.
La victoria llegó por detención en el décimo round, cuando el referí decidió que Barrera había recibido suficiente castigo y detuvo la pelea mientras González estaba castigando al colombiano sobre las cuerdas. La pelea fue entretenida y aunque se esperaba que no fuera más que un sparreo exigente, resultó ser un poco más que eso.
Barrera, quien al inicio conectó algunos golpes al cuerpo, se mantuvo en el intercambio mientras González intentaba quitarse el óxido, encontrar su ritmo y su distancia. Eventualmente, lo logró y dominó la pelea, pero sin mucho brillo. Se notó la falta de boxeo, y también que su físico ya no le responde igual. Hubo menos vértigo, menos dinámica, aunque sin perder el talento natural sumado a su experiencia.
A pesar de ser un rival limitado, Barrera llevó la pelea hasta el final. Esto pone en claro que si en algún momento se tuvo la idea de intentar una pelea de campeonato en el peso gallo, ya fue descartada. Según reporta ESPN, la ruta que se busca ahora para Chocolatito es una pelea contra el campeón OMB de las 115: Kosei Tanaka.
El regreso de Chocolatito al ring no solo es una victoria para él, sino también para el deporte del boxeo. Con su regreso, vuelve uno de los boxeadores más respetados y queridos del deporte, un peleador que siempre ha demostrado habilidad, rapidez y agilidad en el ring, y que a pesar de los obstáculos, nunca ha perdido la pasión por el deporte.
La pelea entre González y Barrera fue un recordatorio de la habilidad y experiencia de Chocolatito. Aunque no fue una pelea tan emocionante como las que nos tiene acostumbrados, fue suficiente para demostrar que aún tiene mucho que ofrecer. La falta de boxeo y la disminución de su físico son signos de que ha estado fuera del ring durante un tiempo, pero su actuación en esta pelea deja claro que está listo para regresar a la acción.
La posibilidad de una pelea contra el campeón Kosei Tanaka es un emocionante prospecto. Tanaka, quien es conocido por su velocidad y habilidad técnica, sería un desafío para González, pero también una oportunidad para demostrar que sigue siendo uno de los mejores en su categoría.
El regreso de Chocolatito González al ring es una buena noticia para todos los amantes del boxeo. Su habilidad para dominar la pelea y su determinación para seguir adelante son un recordatorio de por qué es considerado uno de los mejores boxeadores de la historia. Aunque no sabemos qué depara el futuro para González, una cosa es segura: su regreso al ring ha sido un éxito y todos estamos emocionados por ver qué sigue para él.