El panorama político europeo ha experimentado un cambio significativo con la unión de las fuerzas extremistas más afines a Rusia. Entre los grupos que lideran esta alianza se encuentran el húngaro Viktor Orbán, la francesa Marine Le Pen y la Liga de Matteo Salvini. Esta alianza ha resultado en la formación de una nueva tercera fuerza en el Parlamento Europeo, Patriotas por Europa, que ha surgido de la muerte de Identidad y Democracia (ID), una de las familias ultra en la Eurocámara.
La nueva formación política, que se nutre principalmente de los grupos que integraban ID, cuenta con más de 80 eurodiputados de 12 países, incluyendo partidos como el español Vox y los holandeses de Geert Wilders. Esta unión supera en número a los liberales de Renew y a los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), que incluye a Hermanos de Italia, un partido de raíces neofascistas liderado por la primera ministra italiana, Giorgia Meloni.
Patriotas por Europa fue lanzado hace una semana por el nacionalpopulista Orbán, líder de Fidesz, los austriacos del Partido de la Libertad (FPÖ) y la Alianza de Ciudadanos Descontentos del ex primer ministro checo Andrej Babis. Esta formación reúne a un buen número de fuerzas euroescépticas e incluso eurófobas, que buscan influir en las políticas de la Eurocámara y tratar de bloquear los avances del proyecto de integración europeo.
El Reagrupamiento Nacional (RN) de Le Pen es la mayor fuerza dentro del grupo, con 30 eurodiputados. A pesar de ser conscientes de la afinidad de Patriotas con Rusia y con Vladímir Putin, decidieron sumarse al grupo después de las elecciones francesas. El eurodiputado Jordan Bardella, delfín de Le Pen, quedó como la tercera fuerza política en la Asamblea francesa.
Bardella, visiblemente molesto por el resultado electoral francés, prometió que los 30 eurodiputados del Reagrupamiento Nacional francés desempeñarán plenamente su papel en un gran grupo para rechazar la inundación de inmigrantes, el ecologismo punitivo y la confiscación de la soberanía.
A pesar de estar ausente de la reunión constituyente de este lunes, Bardella ha sido elegido presidente del grupo, y habrá seis vicepresidentes, incluyendo a Hermann Tertsch, eurodiputado de Vox. La vicepresidenta primera será la húngara Kinga Gál, de Fidesz, la segunda formación por número de escaños.
La pregunta que surge es qué influencia real tendrá Patriotas por Europa, y si los distintos partidos de corte ultranacionalista serán capaces de trabajar juntos o si implosionarán debido a sus diferencias.
La formación de Patriotas por Europa ha sido un proceso de ocho días que comenzó con la idea de Orbán, los ultras austriacos y los checos del ex primer ministro Babis. Luego se sumaron más formaciones, hasta que quedó claro que el nuevo grupo sería una versión 3.0 de ID.
Patriotas cumple con las condiciones que se requieren para ser un grupo parlamentario en la Eurocámara, con al menos 23 eurodiputados procedentes de al menos siete países. Según los datos de este lunes, suman 84 parlamentarios de una docena de países.
La mayor delegación es la francesa, pero los húngaros de Orbán han logrado una gran cuota de protagonismo. Con 11 parlamentarios, son la segunda mayor del grupo.
