En la sesión de clasificación que tuvo lugar este sábado en Gran Bretaña, los españoles Fernando Alonso y Carlos Sainz tuvieron un desempeño destacado. Sin embargo, no terminaron ocupando la misma línea de parrilla, con el Ferrari de Sainz mostrando una mayor competitividad que el AMR24 de Alonso. Ambos pilotos se encontraron en la última oportunidad disponible en la Q3, específicamente durante la preparación de la vuelta de salida (outlap), situación que impidió que pudieran realizar una correcta adaptación antes de lanzarse a la pista.
Sainz logró al menos una séptima posición, saliendo por detrás de Nico Hülkenberg y compartiendo línea con Lance Stroll. Por su parte, Alonso decidió no realizar la vuelta final y tuvo que conformarse con la décima posición. La carrera se caracterizó por el caos y la constante lucha por adelantar posiciones, lo que afectó a varios pilotos, incluyendo a Oscar Piastri, Sainz y Alonso.
Ambos pilotos expresaron su desacuerdo con la decisión de sus respectivos equipos de salir tan tarde del pit-lane. Sainz señaló que la estrategia adoptada les costó un par de posiciones, ya que no pudieron preparar correctamente los neumáticos. En la misma línea, Alonso lamentó la falta de previsión de su equipo, que no pudo anticiparse a la salida de los demás monoplazas.
A pesar de estos contratiempos, Sainz logró superar una vez más a su compañero de equipo, Charles Leclerc. Sin embargo, admitió que en la escudería con sede en Maranello aún no han solucionado sus problemas y que esperan sufrir especialmente en circuitos de alta velocidad como Spa-Francorchamps.
Por otro lado, Alonso se enfrentó a una situación similar. A pesar de entrar en la Q3 tras una gran vuelta en la Q2, su outlap se vio seriamente comprometida. La estrategia de Sainz de no dejarle pasar y la interrupción de Piastri afectaron su rendimiento, lo que le llevó a acelerar tarde y a realizar una trazada incorrecta de la última chicane.
Alonso, que saldrá en la décima posición, con Leclerc a sus espaldas y la posibilidad de que Checo Pérez también llegue a mitad del pelotón, tiene como principal objetivo adelantar a Hülkenberg. El piloto asturiano espera que la posible aparición de la lluvia pueda favorecerle, dado que su coche no ha logrado dar un paso adelante en las últimas carreras.
En conclusión, la sesión de clasificación en Gran Bretaña fue una prueba de fuego para los pilotos españoles Fernando Alonso y Carlos Sainz. Ambos tuvieron que lidiar con decisiones estratégicas de sus equipos que afectaron su rendimiento en la pista. Sin embargo, a pesar de estos contratiempos, demostraron su competitividad y su determinación de superar los desafíos. En la carrera del domingo, tendrán la oportunidad de mejorar sus posiciones y demostrar una vez más su habilidad al volante.