El mundo de las carreras de automóviles está experimentando una evolución vertiginosa con el advenimiento de la tecnología eléctrica. El Campeonato del Mundo de Fórmula E es un testimonio de esta revolución, y los fabricantes de automóviles más grandes del mundo están participando activamente en ella. Nissan, un fabricante asiático de renombre, fue el primero en anunciar su participación en el Gen4 de la Fórmula E en la previa del ePrix de Japón.
Desde 2016, Nissan ha estado buscando el éxito en la Fórmula E, habiendo logrado 13 victorias y dos subcampeonatos de constructores. Ahora, una de las marcas europeas más prominentes en la serie de monoplazas eléctricos, también está uniéndose a la carrera.
En un giro interesante, Jaguar ha intensificado su participación al lanzar la única categoría telonera de la Fórmula E, la copa monomarca con los Jaguar I-PACE. Su compromiso con la Fórmula E es tal que ha prometido su presencia hasta el final de la temporada 2030. Esto incluirá su participación con el Gen3 Evo, que debutará el próximo año, y el Gen4, que llegará en 2027.
Jaguar se ha convertido en una de las marcas veteranas en la Fórmula E, habiendo completado su ePrix número 100 en Japón. La firma británica ha encontrado en la Fórmula E el escenario perfecto para promocionar y desarrollar la tecnología eléctrica de sus modelos de carretera. Al parecer, Jaguar tiene la intención de convertirse en una empresa de coches totalmente eléctricos a partir de 2025. Esto hace que su participación en campeonatos como el WEC sea obsoleta.
Jaguar ha construido un equipo extraordinario desde que comenzó en 2016, luchando por victorias y títulos en un verdadero campeonato mundial. Según James Barclay, «Esta es nuestra Fórmula 1. En el futuro, a partir de 2025, seremos una empresa de coches totalmente eléctricos y este es el pináculo de las carreras eléctricas, por lo que la combinación es perfecta».
En el frente técnico, los equipos ya tienen los primeros datos de cómo serán los Gen4. Se espera un cambio de suministrador de neumáticos de Hankook a Bridgestone, así como mejoras en la aerodinámica y dos tipos de paquetes aerodinámicos, uno de baja carga y otro de alta carga, dependiendo del tipo de circuito. Esto sugiere que los futuros monoplazas también competirán en diferentes tipos de circuitos, tanto urbanos como permanentes.
En cuanto a la potencia, los coches que debutarán en 2027 tendrán casi el doble de la potencia de los actuales Gen3 y Gen3 Evo, aumentando desde los 350 kW actuales hasta los 600 kW. Este incremento en la potencia también exigirá cambios en las baterías de los vehículos.
En resumen, el futuro de las carreras de automóviles está aquí, y es eléctrico. Con la Fórmula E liderando el camino, los fabricantes de automóviles están demostrando que la tecnología eléctrica no sólo es viable, sino también emocionante. Con empresas como Nissan y Jaguar a la vanguardia, podemos esperar grandes cosas de la Fórmula E en los años venideros.