El paro laboral en la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE), la principal compañía ferroviaria de Chile, se prolongó hasta el martes después de que los dirigentes sindicales y las autoridades no lograran llegar a un acuerdo el lunes. La movilización de los trabajadores está afectando no sólo a la capital, Santiago, sino también a otras regiones importantes como Valparaíso y Concepción.
Los trabajadores de EFE decidieron iniciar el paro de actividades por una serie de razones. Entre ellas, destacan la falta de seguridad para realizar su trabajo, fallas en la infraestructura y falencias en la comunicación radial. Estos motivos se consideran tan importantes que han llevado a los trabajadores a interrumpir sus labores, a pesar de las consecuencias que esto puede tener en el servicio ferroviario del país.
La decisión de los trabajadores de iniciar el paro llega después de que el sábado pasado se formalizara al maquinista de EFE que estuvo involucrado en el choque entre un tren de pasajeros y otro de carga en San Bernardo. Este accidente, ocurrido el jueves de la semana pasada, resultó en dos muertes y nueve heridos. También fue formalizado el encargado de control de la vía, y ambos permanecen con arresto domiciliario nocturno, tras ser acusados de cuasidelito de homicidio.
Juan Catalán, presidente de la Federación de Transporte Ferroviario de Carga y Pasajeros, explicó que la paralización laboral se mantiene en EFE Central, Valparaíso y EFE Sur. Según él, la razón principal del paro tiene que ver con la seguridad. Los trabajadores no se sienten seguros al realizar sus labores debido a las fallas en la infraestructura y los cruces a nivel de vía.
Además, destacó la falla en la comunicación radial, un componente vital para la seguridad en la operación de los trenes. «Algo tan básico como eso no lo tenemos», dijo Catalán en una entrevista con radio Biobío. Según él, la comunicación radial fue implementada hace unos años, pero ha ido deteriorándose con el tiempo.
A pesar de la situación, Catalán valoró que «la empresa está dispuesta a solucionar el problema dentro de un plazo estipulado». Esto sugiere que, a pesar de la falta de acuerdo en las conversaciones del lunes, hay una disposición por parte de la empresa para trabajar en las soluciones a los problemas planteados por los trabajadores.
La situación actual en EFE es un ejemplo de los desafíos que enfrentan las empresas estatales chilenas en términos de condiciones laborales y de seguridad. En este caso, los trabajadores han decidido hacer valer sus derechos y demandar mejoras en la infraestructura y las comunicaciones, así como garantías de seguridad en su trabajo.
El paro en EFE también pone de manifiesto la importancia de las negociaciones entre los sindicatos y las autoridades en la resolución de conflictos laborales. Las conversaciones entre las partes son clave para llegar a acuerdos que beneficien tanto a los trabajadores como a la empresa, y permitan el normal funcionamiento de los servicios.
En definitiva, el paro en EFE es un reflejo de los desafíos que enfrentan los trabajadores y las empresas en el sector ferroviario chileno. Aunque la situación es difícil, la disposición de la empresa para solucionar los problemas es un paso positivo hacia la resolución del conflicto. Sin embargo, queda por ver si las partes podrán llegar a un acuerdo que satisfaga las demandas de los trabajadores y permita la reanudación de los servicios de trenes en el país.