En medio de la tensión política y las tensiones de la guerra, el escenario político británico se ha intensificado con una acalorada disputa entre dos de las figuras más polarizantes del país: Nigel Farage y Boris Johnson. Ambos son figuras destacadas en la política británica, y sus opiniones a menudo dividen opiniones en el país y más allá.
Farage y Johnson, dos figuras clave en el movimiento Brexit, están enfrentados en medio de la campaña electoral británica debido a la invasión de Ucrania. Johnson ha lanzado fuertes críticas contra Farage, acusándolo de ser «moralmente repugnante» por «repetir las mentiras de Putin» sobre la guerra en Ucrania. Farage, el líder del Reform UK, ha respondido llamándolo «el peor primer ministro de los tiempos modernos».
El punto álgido de esta disputa se produce a 10 días de las elecciones generales del 4 de julio, donde Farage busca convertirse en diputado por el distrito de Clacton con Reform UK. Johnson, que renunció en 2022 como primer ministro y luego como diputado, no se presenta en estas elecciones. Aún así, ha decidido participar, dado el estado actual de las encuestas que muestran un declive del Partido Conservador, superado incluso en varias encuestas por la fuerza liderada por el fundador del Ukip.
La controversia entre Johnson y Farage se intensificó después de que Farage diera una entrevista a la BBC donde argumentó que Occidente «provocó» la guerra de Ucrania al expandir la UE y la OTAN hacia el este. Farage reiteró esta afirmación en un artículo publicado en The Daily Telegraph, argumentando que si se provoca al «oso ruso», no debería sorprender una respuesta agresiva.
Además, Farage afirma que ha estado advirtiendo durante más de una década sobre el riesgo de una guerra con Rusia. Según él, «nuestros líderes no tienen un conocimiento de la historia ni de la psicología rusa». Farage también pidió una «salida pacífica al conflicto».
En respuesta a estas afirmaciones, Johnson sostuvo que «el problema de los últimos 30 años no ha sido la provocación de Occidente sino la debilidad de Occidente ante las agresiones rusas«. Johnson defiende el derecho de Ucrania a ser miembro de la OTAN y de la UE y atribuye la responsabilidad de las agresiones contra Ucrania a Vladimir Putin.
Farage también ha sacado a relucir las viejas simpatías pro-Rusia de Boris Johnson, y ha reproducido titulares de periódicos de hace una década en los que el ex primer ministro culpaba a la UE por la invasión de Crimea. Farage lanzó más acusaciones personales contra Johnson, preguntando quién había «traicionado la voluntad de los votantes del Brexit» y quién había «abierto las puertas a la inmigración masiva».
Mientras tanto, la televisión estatal rusa ha elogiado la «lucidez y la cordura» de Farage, con Marai Zakahrova, portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores ruso, afirmando que Farage es «la única persona que dice a la gente que dos y dos son cuatro».
Al margen de este duelo verbal, al menos una veintena de candidatos de Reform UK han expresado en las redes sus simpatías por Putin, según un recuento de The Daily Mail, un tabloide conservador al que Farage ha acusado de «seguir el juego a los tories«.
Esta reñida batalla política entre Farage y Johnson se desarrolla en un momento de creciente tensión en el escenario mundial, lo que subraya el papel crucial de la política y la diplomacia en la gestión de las crisis internacionales.