El debate en torno a los posibles daños que las redes sociales pueden causar en la salud mental de los jóvenes se ha intensificado recientemente. El principal responsable de la salud en Estados Unidos, el cirujano general Vivek Murthy, ha propuesto que se requiera una etiqueta de advertencia en las plataformas de redes sociales, similar a las que se encuentran en los paquetes de cigarrillos y botellas de alcohol.
La sugerencia de Murthy es que estas etiquetas adviertan acerca de los posibles daños a la salud mental que el uso excesivo de estas plataformas puede causar, especialmente entre los menores de edad. El cirujano general considera que las redes sociales pueden ser tan dañinas como las drogas legales, como el tabaco y el alcohol.
Según Murthy, la falta de advertencias ha permitido a las empresas tecnológicas prosperar a expensas de la salud mental de los jóvenes. La situación es similar a la que enfrentaron las empresas tabacaleras, que fueron acusadas de causar daño a los consumidores sin proporcionar advertencias adecuadas sobre los riesgos asociados con sus productos.
En una columna reciente publicada por The New York Times, Murthy esbozó la necesidad de tomar medidas más estrictas para proteger a los menores de edad. Argumentó que es hora de «exigir una advertencia del cirujano general en las plataformas de redes sociales, indicando que su uso está asociado con daños significativos a la salud mental de los adolescentes».
Estudios sobre el tabaco han demostrado que las etiquetas de advertencia pueden aumentar la conciencia y cambiar el comportamiento. Citando una encuesta, Murthy señaló que el 76% de los padres latinos dijeron que una advertencia de este tipo los incitaría a limitar o monitorear el uso de las redes sociales por parte de sus hijos.
Murthy reconoce que, por sí sola, una etiqueta de advertencia no hará que las redes sociales sean seguras para los jóvenes. Sin embargo, servirá como un recordatorio constante para padres y adolescentes de que las redes sociales no han demostrado ser seguras. Para que esta medida sea efectiva, Murthy sostiene que el Congreso debería desarrollar una normativa que proteja a los jóvenes del acoso, el abuso y la explotación en línea, así como de la exposición a la violencia extrema y al contenido sexual.
Murthy también pide a las empresas tecnológicas que hagan más por proteger a los usuarios. Sugiere que se debería exigir a estas empresas que compartan todos sus datos sobre los efectos en la salud con científicos independientes y el público. También sugiere que se permitan auditorías de seguridad independientes.
La polémica en torno a la toxicidad de las redes sociales ha ido en aumento en los últimos meses, especialmente en Estados Unidos. Varias autoridades políticas ya han tomado medidas contra las grandes empresas tecnológicas. Meta, la matriz de Facebook, Instagram y WhatsApp, ha sido demandada por los fiscales de más de 40 estados por «atrapar» a los niños en sus plataformas.
La ciudad de Nueva York también ha demandado a TikTok, Meta, Snap y YouTube de Google, acusándolas de «alimentar la crisis nacional de salud mental juvenil». Estas acciones legales muestran que el debate sobre el impacto de las redes sociales en la salud mental de los jóvenes está lejos de terminar. A medida que la sociedad se vuelve cada vez más digital, la necesidad de proteger la salud mental de los usuarios más jóvenes se hace cada vez más urgente.