La reciente decisión de Ford de revivir la denominación Puma y la consecuente atribución del nombre Mustang a su crossover eléctrico han suscitado un revuelo considerable entre los entusiastas del automóvil. A pesar de las críticas, Ford ha demostrado una vez más que la nostalgia es una poderosa herramienta de marketing. En una maniobra audaz, la compañía ha anunciado sus planes de seguir empleando denominaciones icónicas para sus futuros vehículos, comenzando con su próximo lanzamiento eléctrico en el continente europeo. Se espera que el vehículo, que se revelará el 10 de julio, lleve el nombre de Ford Capri.
El Ford Capri original era un elegante coupé de dos puertas que Ford vendió desde finales de los años sesenta hasta 1986. Con 38 años de diferencia entre el último Ford Capri y el próximo vehículo eléctrico de la marca, se puede decir que la denominación ha tenido un «reposo» necesario. Aunque el nombre Capri puede no resonar tanto como Puma o Mustang entre el público europeo general, evoca una sensación de libertad, vacaciones y despreocupación.
El nuevo Ford Capri será un crossover eléctrico construido sobre la plataforma MEB del Grupo Volkswagen, la misma plataforma utilizada para el Ford Explorer EV. Esta elección es el fruto de un gran acuerdo entre ambos grupos para producir vehículos eléctricos destinados al mercado europeo. Como resultado, el nuevo Ford Capri compartirá plataforma con coches como el Volkswagen ID.4, el CUPRA Born y el Skoda Enyaq.
Además de la plataforma, el nuevo Ford Capri también compartirá las baterías y el software de estos vehículos, elementos integrales de cualquier coche moderno. Ford estará a cargo del diseño de la carrocería y el interior, creando un vehículo único y específico para la marca. Las fotos espía que han circulado en Internet durante las últimas semanas revelan que el vehículo es un crossover compacto de aspecto coupé, con una longitud de unos 4,50 metros.
El nuevo Ford Capri estará equipado con baterías de hasta 77 kWh de capacidad y una autonomía WLTP superior a los 500 km. Su presentación oficial está prevista para el 10 de julio, y se espera que esté a la venta a finales de este año como parte de la estrategia 100% eléctrica de Ford. El vehículo será producido en las históricas instalaciones europeas de Ford en Colonia, Alemania, que se están reorientando hacia la producción exclusiva de coches eléctricos.
Las imágenes del Ford Explorer EV permiten hacerse una idea de lo que los consumidores pueden esperar del nuevo Ford Capri. La amplia gama de vehículos eléctricos de Ford, junto con su compromiso con la sostenibilidad y la innovación, hacen de esta empresa un actor clave en el futuro de la movilidad eléctrica. Con el resurgimiento de nombres icónicos como Puma, Mustang y ahora Capri, Ford está demostrando que está dispuesto a fusionar el pasado y el futuro para crear vehículos que no sólo sean ecológicos, sino también emocionantes.
La estrategia de Ford de revivir nombres icónicos es tanto un guiño a su legado como una declaración de su compromiso con el futuro. La decisión de utilizar la denominación Capri para su próximo vehículo eléctrico es un claro indicativo de que la empresa pretende continuar esta tendencia. Con su gran autonomía, diseño moderno y características innovadoras, el nuevo Ford Capri promete ser un vehículo emocionante que, sin duda, traerá consigo un aire de nostalgia.
Independientemente de las opiniones sobre la reutilización de nombres clásicos, lo que es innegable es el compromiso de Ford con la movilidad eléctrica. El nuevo Ford Capri es un ejemplo más de cómo la empresa está aprovechando las tecnologías más recientes para desarrollar vehículos que no sólo sean respetuosos con el medio ambiente, sino también emocionalmente atractivos para los conductores. A medida que se acerca la fecha de su presentación, el mundo espera con impaciencia para ver qué tiene Ford bajo la manga con este nuevo y emocionante vehículo eléctrico.