El auge de modelos deportivos SUV como el CUPRA Formentor ha inspirado a otros fabricantes a desarrollar su propia versión de estos vehículos. Uno de los ejemplos más recientes es el Renault Rafale, un SUV con un diseño impresionante y una ambición considerable. Además de ser fabricado en España, este vehículo apuesta por los motores híbridos, lo que le permite no sólo ser una excelente alternativa al Formentor, sino también una opción a considerar frente a otros SUV Coupé del segmento premium, como el Mercedes GLC Coupé.
El Renault Rafale es un esfuerzo de la marca francesa para introducir un SUV coupé en el segmento D, una movida que se produce por primera vez. Este movimiento se produce tras el lanzamiento de los modelos Austral y Espace, que también se fabrican en Palencia junto al Rafale, y con el conocimiento del éxito del Arkana en el segmento C. A pesar de ser su primera incursión en esta categoría con esta fórmula, parece que está yendo bien para Renault, que puede sacar aún más rendimiento de la plataforma modular CMF-CD.
El resultado de este «experimento» es un coche de 4,71 metros de longitud que pone todo su enfoque en el diseño para ofrecer una estética deportiva, imponente y realmente atractiva. Pero hay que tener en cuenta que, en términos de proporciones, el Rafale no es precisamente un coche pequeño. De hecho, iguala al Espace en longitud y batalla, con esta última de 2,74 metros. Sin embargo, en este coche, la forma prevalece sobre la función, con el objetivo de que el Rafale se convierta en el coche más aspiracional y deseable dentro de la gama Renault.
El Rafale sólo se venderá con un motor híbrido de 200 CV y tracción 4×2, o un motor híbrido enchufable de 300 CV y tracción 4×4. A lo largo de nuestro análisis detallado, se puede comprobar que el Rafale es un coche que ofrece un interior espacioso y bien acabado, con un equipamiento del que se pueden hacer pocos reproches. El sistema de infoentretenimiento es uno de sus aspectos más destacados, ofreciendo una interfaz que brilla en resolución, respuesta y ergonomía. Además, demuestra que con una pantalla de 12″ es más que suficiente para disfrutar de una gran experiencia multimedia.
A pesar de su diseño más deportivo, el Rafale sigue siendo un vehículo perfectamente capaz de cumplir como vehículo familiar, ya que dispone de amplias plazas traseras y un maletero de hasta 532 litros. Aunque un Austral o un Espace son mejores opciones en este aspecto, el plus de diseño impone ciertas limitaciones, aunque en este caso no son tan críticas como ocurre con otros SUV de aires coupé.
El Renault Rafale, con motor híbrido de 200 CV, tiene un precio de partida de 41.807 euros. Por el momento, sólo se puede adquirir con un motor híbrido de 200 CV basado en un propulsor de gasolina 1.2 Turbo. Aunque esta mecánica, que es la que hemos podido conducir durante esta primera toma de contacto, convence en funcionamiento y consumos, aún está ligeramente por debajo del equilibrio que ofrece Toyota en sus motores híbridos equivalentes.
En unos meses, llegará la variante híbrida enchufable del Rafale. A partir del mismo esquema híbrido que hemos probado, se consigue extraer 300 CV de potencia máxima combinada y disfrutar de tracción total gracias a la adición de un motor eléctrico independiente sobre el eje posterior. Además, ofrece 100 Km de autonomía en modo eléctrico a través de unas baterías de 22 kWh.