El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, han firmado un acuerdo bilateral de defensa con el objetivo de garantizar la capacidad defensiva de Ucrania y acercar a Kiev a su objetivo de convertirse en miembro de pleno derecho de la OTAN. Este acuerdo representa un paso significativo hacia la integración de Ucrania en las comunidades transatlánticas y demuestra el compromiso de Ucrania con la reforma de su seguridad, economía y democracia de acuerdo con sus metas de acceso a la Unión Europea y la OTAN.
El acuerdo fue firmado durante la cumbre del G-7 en Borgo Egnazia, sur de Italia, y tiene una vigencia renovable de diez años. Según el acuerdo, en caso de una nueva agresión contra Ucrania, las autoridades militares de Estados Unidos y Ucrania tendrán 24 horas para reunirse y determinar la respuesta apropiada.
El acuerdo busca transmitir un mensaje de tranquilidad a Ucrania y garantizarle el apoyo de Estados Unidos en caso de guerra actual o futura. Además, busca proteger una de las principales prioridades de la administración Biden en política exterior y defensa ante el posible regreso a la Casa Blanca del ex presidente Donald Trump.
El acuerdo, descrito por el consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, tiene como objetivo fortalecer la capacidad defensiva de Ucrania y asegurar que el apoyo de Washington a Ucrania continuará en el futuro a largo plazo, especialmente en el área de defensa y seguridad. Además, incluye asistencia militar, ayuda humanitaria y cooperación financiera, y resalta la integridad territorial de Ucrania.
El acuerdo también reconoce que Ucrania necesita una fuerza militar significativa, capacidades sólidas y inversiones sostenidas en su base industrial de defensa que sean consistentes con los estándares de la OTAN. Estados Unidos se compromete a apoyar el desarrollo de un sistema de defensa antimisiles y aéreo en Ucrania. Además, ambas partes acordaron tomar nuevos pasos para la transición hacia una arquitectura de defensa moderna para Ucrania con radares, interceptores y equipo de apoyo en el espectro táctico y estratégico.
El acuerdo también destaca que el futuro de Ucrania está en la OTAN, una declaración que da esperanzas a Zelenski. Sin embargo, también se dejó en claro que en la próxima cumbre de la Alianza en Washington, no se discutirá la membresía de Kiev.
No obstante, debido a que el acuerdo no tiene la categoría de tratado, un futuro presidente podría cancelarlo. A pesar de su crítica pasada hacia la ayuda a Ucrania, Trump no ordenó a los legisladores republicanos bloquear el paquete de asistencia de 61.000 millones de dólares que el Congreso aprobó en abril. Sin embargo, durante una visita reciente al Capitolio, volvió a cuestionar la utilidad de la guerra para Estados Unidos.