El presidente de Chile, Gabriel Boric, recientemente aterrizó en Múnich, Alemania, como parte de su gira europea. Poco después de su llegada, invitó a los ministros y parlamentarios de la delegación a un restaurante de tapas españolas cercano al hotel en el que se hospedaban. Este no fue el primer momento de camaradería fuera de los encuentros oficiales, previamente habían visitado el museo Story Bunker de Berlín.
Los parlamentarios, entre los que se encontraban los senadores Sergio Gahona (UDI) y Ximena Órdenes (PPD), y los diputados Tomás de Rementería (PS), Vlado Mirosevic (PL), Alberto Undurraga (DC), Érika Olivera (Demócratas), Marlene Pérez (UDI), Diego Schalper (RN) y Enrique Lee, respetaron la concentración del Jefe de Estado durante la visita al museo. Sin embargo, en Múnich, tuvieron la oportunidad de conversar en profundidad y discutir las primarias municipales que se llevaron a cabo el domingo.
Durante la reunión en la que algunos disfrutaron de cerveza, Boric pidió a los presentes que se relajaran. Los parlamentarios y ministros valoraron el tono de la conversación. Incluso, hubo espacio para conversar sobre fútbol con los diputados De Rementería y Schalper.
Además de las conversaciones ligeras, también hubo espacio para discutir sobre política. En medio del análisis de los resultados de las elecciones europeas, marcados por el avance de la extrema derecha en países como Francia y Alemania, el presidente profundizó en su llamado a valorar la democracia en Chile. Esta intervención duró alrededor de cinco minutos.
Durante su gira por Alemania, Boric ha hecho alusión en varias ocasiones al excandidato presidencial José Antonio Kast, quien no forma parte de la delegación. Boric expresó su preocupación por el avance de fuerzas que cuestionan o no valoran la democracia, que relativizan la importancia de los derechos humanos o que creen que hay ciudadanos de primera o segunda categoría.
En relación con Kast, Boric cuestionó qué sería diferente si él no fuera el gobierno, o si Kast, el candidato de ultraderecha, hubiera ganado las elecciones. El presidente también hizo un llamado al partido del exabanderado presidencial, indicando que se puede trabajar en conjunto con la «derecha democrática».
En respuesta a los comentarios de Boric, Kast afirmó que si él hubiera ganado las elecciones, no estaría de gira de estudios con 7 ministros y 10 parlamentarios, sino en La Moneda trabajando para enfrentar la crisis de seguridad, económica y social.
La conversación en Múnich también incluyó las críticas recibidas por el diputado Undurraga, presidente de la Democracia Cristiana, por los resultados de los comicios en los que perdió su cupo en Peñalolén. Sin embargo, Undurraga minimizó la situación, argumentando que habían mantenido dos de los tres cupos en los que competían y que la derrota en Peñalolén era previsible.
Al finalizar la reunión, que duró más de dos horas, Boric expresó su intención de realizar otra reunión de trabajo en Estocolmo, Suecia, próxima parada de la gira. Sin embargo, no todos los diputados podrían estar presentes, ya que tanto Marlene Pérez como Schalper han mostrado inquietud por el sistema frontal en sus regiones y han considerado la posibilidad de adelantar su regreso a Chile.
