El Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha expresado su preocupación por la respuesta de Hamás a la propuesta de alto el fuego en Gaza anunciada por el presidente Joe Biden a finales de mayo. En una declaración desde Qatar, Blinken describió la respuesta de Hamás como presentando «muchos cambios», algunos de los cuales él consideró aceptables, mientras que otros no lo eran. Este anuncio deja en el aire el futuro del plan trazado por Washington.
Blinken ha sido una figura clave en la diplomacia estadounidense en Oriente Próximo, habiendo realizado ocho giras en la región desde octubre. Su objetivo es impulsar la hoja de ruta de su administración para la paz en la región. En su declaración, Blinken indicó que el trabajo continuaría en los próximos días junto con Qatar y Egipto para tratar de reconciliar las diferencias entre Israel y el movimiento palestino.
El Secretario de Estado mantuvo un tono contundente contra Hamás, declarando que el movimiento palestino podría haber respondido a la propuesta de Biden con un simple «sí». Sin embargo, Hamás decidió esperar dos semanas antes de proponer cambios adicionales, algunos de los cuales rompen con la postura adoptada anteriormente. Blinken se negó a especificar qué cambios había sugerido Hamás, pero afirmó que seguirán presionando para ver si es posible acercar las diferentes posiciones e intentar alcanzar un acuerdo.
Osama Hamdan, alto cargo de Hamás, reaccionó a las declaraciones de Blinken, afirmando que el diplomático estadounidense forma parte del problema y no de la solución. Hamdan insistió en que Israel es quien rechaza un acuerdo al insistir en que la tregua sea solo temporal. Sin embargo, según el grupo, su respuesta al plan estadounidense es «responsable, seria y positiva», y que cumple con las exigencias planteadas hasta ahora.
Ismail Haniya, el jefe político de Hamás, y el secretario general de la Yihad Islámica, Ziad Al Najalah, subrayaron en una reunión en Doha que cualquier acuerdo debe incluir un «cese permanente» de la ofensiva israelí y la «retirada completa» de sus tropas de Gaza.
Fuentes israelíes han afirmado que la respuesta de Hamás a la propuesta estadounidense equivale a un rechazo. Mientras tanto, Hamás sostiene que están intentando garantizar la retirada de las tropas israelíes de Gaza y el cese de los ataques para evitar que estos se reanuden una vez liberados todos los rehenes.
A pesar de la insistencia de Blinken en que el Gobierno de Israel ha aceptado la propuesta, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha lanzado mensajes contradictorios al respecto.
Mohammed Bin Abdulrahman Al Thani, el primer ministro y ministro de Exteriores de Qatar, considera que es necesario alcanzar “una solución permanente” y no solamente “temporal” en Gaza. Por otro lado, Egipto, el otro mediador principal entre las partes, está intensificando los esfuerzos diplomáticos para intentar salvar las negociaciones en curso.
Blinken también subrayó que alcanzar un acuerdo de tregua en Gaza es la mejor manera para impulsar una “solución diplomática” en la frontera entre Israel y Líbano. Esta región ha sido escenario de una espiral de violencia desde el inicio de la ofensiva contra Gaza, con enfrentamientos entre el ejército israelí y el movimiento libanés Hezbolá. La situación se agravó cuando Israel confirmó haber matado a un alto mando de Hezbolá, a lo que el grupo respondió con su mayor ataque desde el inicio de la guerra.
