Si tienes un coche diésel entrado en años, y la ITV anual ya le supone un reto considerable, de cara a 2025, una nueva prueba le hará temblar todavía más. La medida se ha anunciado a apenas días del inicio del año, dejando perplejos a conductores y asociaciones de automovilistas. La nueva prueba de emisiones solo puede definirse como una «prueba del pañuelo» para coches diésel, y promete zanjar de cuajo cualquier modificación ilegal en los sistemas anticontaminación de los coches, así como comprobar con más precisión su correcto funcionamiento.
Una tela reactiva que no miente: el arma secreta contra el coche diésel
La nueva prueba ha sido anunciada por parte de la patronal del sector. En declaraciones a los medios especializados, Inocencio Santos, portavoz de las ITV, ha desgranado el funcionamiento del sistema. «En colaboración con empresas valencianas del sector textil y el CSIC, se ha desarrollado una tela reactiva que usaremos en todas las inspecciones de emisiones de la ITV, como complemento a la habitual sonda de escape».
Parece una broma, pero su funcionamiento está basado en métodos científicos
La sonda de escape mide la opacidad de gases, y por ello, el correcto funcionamiento del sistema anticontaminación del motor, pero no es capaz de detectar ciertas modificaciones ilegales, como la supresión de filtros de partículas o la anulación de las EGR. Esta «prueba del pañuelo» será especialmente efectiva en vehículos anteriores a la normativa Euro 5 – es decir, aquellos anteriores, generalmente, al año 2012 – a los que no se les conecta un escáner OBD para comprobar la manipulación ilegal de estos sistemas.
¿Cómo funciona la «prueba del pañuelo» de las ITV?
Tras comprobar la opacidad de gases, que debe estar en los valores especificados por el fabricante, se procede a tapar el tubo de escape del coche con esta tela reactiva, usando un adaptador similar a una cincha. A continuación, el coche vuelve a acelerarse hasta el corte de encendido, durante 15 segundos seguidos. Es un tiempo bastante más elevado que el de las pruebas de opacidad, debido a que el reactivo presente en la tela es de origen natural – una hierba que crece únicamente en la parte más occidental de la provincia de Badajoz.
El fraude de emisiones y la alteración de EGR y FAP siguen estando a la orden del día
El reactivo imbuido físicamente en el material textil se teñirá de color verde si la prueba es satisfactoria, pero se tornará rojo si detecta una mayor concentración de lo debido de óxidos de nitrógeno – claro síntoma de una EGR en mal estado, o una EGR alterada. Para que vuestras conciencias queden tranquilas, las telas reactivas son lavables y reutilizables. Para facilitar la tarea a los inspectores de línea, que deberán lavar las telas cada día, se instalarán unos pequeños tendales en las cabinas de medición de gases.
En pocas palabras, este sistema, que parece una broma de mal gusto, pondrá aun más contra las cuerdas a los vehículos entrados en años – especialmente abundantes entre la clase más trabajadora de nuestro país.
¡Feliz día de los Santos Inocentes!
artículo original de: https://www.diariomotor.com/noticia/prueba-panuelo-itv-2025-inocentada/