Por Mauricio Sulaimán – Presidente del WBC- Hijo de José Sulaimán
Canelo Álvarez es, sin duda, uno de los deportistas más destacados a nivel mundial. Con una carrera que ha sido emblemática y llena de éxitos, lleva con orgullo la bandera de México en cada combate. Sin embargo, a pesar de su éxito y poder en el mundo del boxeo, Canelo ha sido víctima del bullying cibernético.
Desde que se dio a conocer en el ámbito boxístico, Canelo ha generado envidias debido a su éxito. La rivalidad entre Televisa y TV Azteca exacerbó esta situación, creando una competencia directa con Julio César Chávez Jr.. Esta contienda mediática provocó que algunos periodistas tomaran partido y utilizaran sus plataformas para atacar a Canelo.
Las redes sociales pueden ser especialmente crueles. Muchas personas se esconden en el anonimato o en la distancia para lanzar comentarios venenosos. A pesar de todo, Canelo ha demostrado ser fuerte tanto psicológica como mentalmente, manejando esta constante campaña de acoso tanto de extraños como, en algunos casos, de conocidos.
Por otro lado, se aproxima la máxima celebración del año en el mundo del boxeo: la función del 14 de septiembre. Este evento es especialmente esperado debido a la intensa rivalidad que existe entre México y Puerto Rico.
En esta ocasión, Canelo se enfrentará en la T-Mobile Arena al boricua Edgar Berlanga, un boxeador que llega con un récord invicto y mucha hambre de triunfo. La conferencia de prensa que marcó el inicio del evento estuvo cargada de insultos y agresiones, algo común cuando se enfrentan peleadores de estas dos naciones.
El contexto de este combate no solo se limita al ring. La rivalidad entre México y Puerto Rico en el boxeo es una de las más históricas y acérrimas en el deporte. Peleas legendarias como las de Julio César Chávez contra Edwin Rosario, o Salvador Sánchez contra Wilfredo Gómez, han cimentado una tradición de competencia feroz entre ambas naciones.
Canelo ha enfrentado críticas a lo largo de su carrera, pero también ha tenido momentos de reivindicación. Su victoria contra Gennady Golovkin en 2018, por ejemplo, fue un punto de inflexión que consolidó su posición como uno de los mejores boxeadores libra por libra del mundo.
Edgar Berlanga, por su parte, se presenta como un rival digno. Con un récord de 20-0 con 16 nocauts, el puertorriqueño ha demostrado tener el poder y la técnica para desafiar a los mejores. Berlanga ha expresado su respeto por Canelo, pero también ha dejado claro que no tiene miedo de enfrentarlo.
La preparación para este combate ha sido intensa. Canelo ha entrenado en su campamento habitual en San Diego, California, bajo la tutela de su entrenador de toda la vida, Eddy Reynoso. Por su parte, Berlanga ha estado trabajando en su técnica y resistencia física, consciente de que enfrentará a uno de los boxeadores más completos de la actualidad.
La T-Mobile Arena en Las Vegas será el escenario de este esperado combate. Este recinto ha sido testigo de algunas de las peleas más memorables de la última década y el enfrentamiento entre Canelo y Berlanga promete no ser la excepción.
La expectativa es alta no solo por el calibre de los contendientes, sino también por lo que está en juego. Una victoria para Canelo reafirmaría su dominio en el boxeo mundial y fortalecería su legado. Para Berlanga, una victoria significaría su ascenso al estrellato y la consolidación de su carrera.
El combate también tiene implicaciones más amplias para el mundo del boxeo. Con la creciente popularidad de las plataformas de streaming y la expansión global del deporte, peleas como esta ayudan a atraer a una audiencia más amplia y diversa. Además, eventos de esta magnitud sirven para inspirar a las nuevas generaciones de boxeadores en ambas naciones.
En cuanto a la logística, la promoción del evento ha sido intensa. Desde anuncios en televisión y radio hasta campañas en redes sociales, todo está diseñado para asegurar que este combate sea uno de los más vistos del año. La venta de boletos ha sido un éxito rotundo, con entradas agotadas en cuestión de días.
La noche del 14 de septiembre será una celebración no solo para los fanáticos del boxeo, sino también para aquellos que aprecian la rica historia y la intensa rivalidad entre México y Puerto Rico. Es un evento que promete emociones fuertes, técnica de alto nivel y, sobre todo, una competencia feroz y respetuosa entre dos grandes del boxeo.
Finalmente, es importante recordar que, más allá de la rivalidad y el espectáculo, el boxeo es un deporte que requiere disciplina, dedicación y respeto. Tanto Canelo como Berlanga encarnan estos valores y su enfrentamiento será un testimonio de lo mejor que el boxeo tiene para ofrecer.
