El director nacional de la Policía de Investigaciones (PDI), Eduardo Cerna, reveló que la institución tenía información previa sobre el robo a una sucursal de la empresa de valores en Rancagua desde el 29 de julio. Este anuncio ha generado polémica y ha llevado al retiro de Alex Zúñiga Castañeda, prefecto provincial de Cachapoal, quien también se encuentra bajo investigación de la Fiscalía por «omisión de denuncia y obstrucción de la investigación».
En una actividad pública en la Región del Biobío, Cerna aclaró que una unidad específica de la PDI había enviado una comunicación formal al jefe regional con algunos indicios que señalaban a una empresa transportadora de valores. Sin embargo, esta empresa no fue la que posteriormente fue víctima del robo con intimidación.
El director de la PDI indicó que la información fue recibida el 29 de julio, pero el Alto Mando de la PDI sólo tuvo conocimiento de estos antecedentes tras la materialización del robo a Brinks en Rancagua. «En ese momento tomamos conocimiento, y obviamente el prefecto provincial no le había dado mayor tramitación más allá de que alguna, supuestamente, revisión que fue lenta, no oportuna, no precisa, y que no comunicó a la fiscalía», expresó Cerna.
El director de la policía civil destacó que 24 horas después del asalto, «el prefecto regional instruyó a este prefecto para que haga las comunicaciones con el Ministerio Público respecto de estos hechos». Este detalle ha sido crucial en la decisión de llevar a retiro al prefecto provincial, ya que no hubo un manejo adecuado y oportuno de la información.
Cerna subrayó su decisión de no tolerar este tipo de situaciones que empañan y perjudican el comprometido trabajo de miles de hombres y mujeres de la PDI. «Instruí al subdirector de gestión de las personas que notifique de mi decisión, el día lunes sobre llamar a retiro al prefecto provincial. No lo vamos a permitir y no vamos a tolerar hechos de esta manera. Porque efectivamente, enlodan y daña el trabajo comprometido de miles de hombres y mujeres que colocamos el corazón y la pasión en esto», declaró.
El caso del robo a la Brinks en Rancagua ha estado rodeado de controversia desde su inicio. Esta nueva revelación de que la PDI tenía información previa sobre un posible robo a una empresa transportadora de valores agrega un nuevo nivel de complejidad al caso.
La decisión de Cerna de hacer pública esta información y de llamar a retiro al prefecto provincial de Cachapoal muestra un intento de la PDI de mantener la transparencia y responsabilidad en sus operaciones. Sin embargo, también plantea preguntas sobre cómo se maneja la información dentro de la institución y el procedimiento que se sigue cuando se recibe información sobre posibles delitos.
La investigación de la Fiscalía sobre «omisión de denuncia y obstrucción de la investigación» también pone en el foco el procedimiento interno de la PDI y el manejo de la información. Este caso podría tener implicaciones significativas para la institución y podría llevar a cambios en la forma en que se maneja la información en el futuro.
El robo a la Brinks y la posterior revelación de que la PDI tenía información previa sobre el posible robo ha puesto a la institución bajo escrutinio. Como resultado, la PDI está tomando medidas para asegurar que se mantenga la responsabilidad y la transparencia en sus operaciones. Sin embargo, este caso también ha planteado preguntas sobre cómo se maneja la información dentro de la institución y el procedimiento que se sigue cuando se recibe información sobre posibles delitos.
