El fiscal regional de O’Higgins, Aquiles Cubillos, ha dado a conocer que iniciará una investigación contra la Policía de Investigaciones (PDI) por omisión de denuncia y obstrucción de la investigación, esto en relación con el reciente robo a una sucursal de Brinks en Rancagua. Esta decisión surge a raíz de la información revelada por los medios de comunicación, que afirmaban que la PDI ya tenía conocimiento previo del asalto que se llevó a cabo el pasado 16 de agosto.
Cubillos, en una entrevista con CNN Chile, declaró que conoció estos hechos a través de un comunicado emitido por la PDI, al igual que el público en general. En sus propias palabras, el fiscal expresó su sorpresa al no haber recibido ninguna información previa de que la PDI tuviera antecedentes sobre la perpetración de este delito. Esta falta de comunicación ha llevado a la apertura de una causa por omisión de denuncia y obstrucción a la investigación.
El robo a la sucursal de Brinks en Rancagua fue un suceso que acaparó la atención de los medios, siendo descrito por algunos como un evento de naturaleza cinematográfica. Este hecho ocurre en un contexto donde la seguridad y la protección de los bienes de las instituciones financieras se consideran de suma importancia.
Según el fiscal Cubillos, el Ministerio Público accedió a los datos proporcionados por la PDI a las 18:30 horas del martes pasado. A partir de ese momento, se ordenó una serie de diligencias para verificar la información proporcionada por la PDI. Según el fiscal, hubiera sido significativamente útil haber tenido acceso a estos datos desde el principio para facilitar la investigación.
En este contexto, Cubillos informó que ha decidido abrir una causa por omisión de denuncia y obstrucción a la investigación. Según él, los antecedentes ya existían antes del 16 de agosto, fecha del robo, por lo que deberían haber sido informados al Ministerio Público en su momento. Esta falta de comunicación podría constituir una omisión de denuncia, y ahora es necesario investigar por qué no se proporcionaron esos datos a tiempo.
El fiscal de O’Higgins también señaló que cualquier participación de algún funcionario de la PDI o Carabineros en el robo a Brinks será considerada y objeto de la investigación por omisión de denuncia y obstrucción a la investigación.
Esta situación plantea interrogantes sobre la eficiencia y efectividad de la PDI, así como sobre su compromiso con la seguridad y el orden público. La omisión de denuncia y la obstrucción a la investigación son delitos graves que pueden tener serias consecuencias para aquellos involucrados.
El caso del robo a Brinks en Rancagua y la posterior investigación destaca la importancia de la transparencia y la comunicación entre los diferentes cuerpos de seguridad y el Ministerio Público. La falta de comunicación y cooperación puede obstaculizar la eficacia de las investigaciones y potencialmente permitir que los delincuentes evadan la justicia.
La decisión del fiscal regional de O’Higgins de abrir una causa por omisión de denuncia y obstrucción a la investigación envía un mensaje claro: cualquier falta de transparencia o cooperación en las investigaciones criminales será tratada con la mayor seriedad.
La sociedad espera con gran interés los resultados de esta investigación, que sin duda tendrá un impacto significativo en el funcionamiento de los cuerpos de seguridad y en el sistema de justicia penal en general. Esta investigación será un hito importante en la lucha contra el crimen y la promoción de la justicia.