En una sorprendente vuelta de acontecimientos en la velada de boxeo de esta noche, el olímpico italiano Guido Vianello (13-2-1, 11 KOs) logró un triunfo épico sobre su oponente, Arslanbek Makhmudov (19-2, 18 KOs). Este combate, que se convirtió en el punto culminante de la carrera de Vianello, se produjo en el octavo asalto con un nocaut técnico.
Este enfrentamiento fue el semi estelar de la noche, con el combate Christian Mbilli vs. Sergiy Derevyanchenko como plato fuerte de la velada. Sin embargo, la impresionante actuación de Vianello se convirtió en el centro de atención.
Estos dos pesos pesados del boxeo se habían enfrentado previamente en la Serie Mundial de Boxeo hace casi una década. Durante ese encuentro, Vianello se vio obligado a retirarse en el cuarto asalto debido a una lesión en el oído. Sin embargo, esta vez, las tornas cambiaron a favor del italiano.
Desde el primer asalto, Vianello demostró su habilidad en el ring, conectando con facilidad su mano derecha, tanto en forma de uppercut como de recto. Fue precisamente este último golpe el que resultó ser crucial para el desarrollo del combate, ya que provocó que el ojo izquierdo de Makhmudov se hinchara para el tercer asalto.
A pesar de su visión limitada, Makhmudov intentó cortar el ring, pero sus esfuerzos resultaron insuficientes. Fue penalizado con la pérdida de un punto en el sexto asalto por golpear detrás de la cabeza de Vianello. A pesar de la penalización, el italiano siguió dominando el combate, conectando golpes desde la distancia en el séptimo asalto e incluso forzando a que el guante de Makhmudov tocara la lona, aunque este incidente no se consideró como una caída.
Antes de comenzar el octavo asalto, el médico determinó que Makhmudov ya no estaba en condiciones de continuar. Con esta decisión, Vianello se aseguró una victoria por nocaut técnico, la más importante de su carrera hasta la fecha.
Tras su victoria, un emocionado Vianello declaró:
«Ahora soy un contendiente. Estoy listo para el nivel mundial, y lo demostré esta noche.»
«Pensé que había vencido a Efe Ajagba, y llegué a esta pelea con mucha confianza. Estaba en la mejor forma de mi carrera, y eso se notó esta noche. Lo dominé y luego lo noqueé.»
«Solo tenía que mantener la compostura. Hubo una caída que no fue contada, pero sabía que si seguía con mi estrategia, obtendría el nocaut».
Con esta victoria, Vianello se consolida como una de las figuras a tener en cuenta en el mundo del boxeo. Este triunfo es un claro testimonio de su capacidad para adaptarse y superar adversidades, así como de su determinación para estar a la altura de los retos que se le plantean en el ring.