En medio de la crisis energética que se vive en la Región Metropolitana, los alcaldes de las comunas de Lampa y Recoleta han expresado su malestar con el proveedor de energía, Enel. En diálogo con EL DÍNAMO, criticaron duramente a la empresa por su incapacidad para restablecer el suministro en sus respectivas comunas, donde más de mil vecinos permanecen sin luz incluso después de más de 14 horas de haber pasado el plazo que el Gobierno había otorgado a Enel para resolver los cortes de energía.
La Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) ha confirmado que más de diez mil viviendas en la Región Metropolitana se mantienen sin energía eléctrica, después del paso del último sistema frontal en el país. Entre las comunas más afectadas se encuentran Puente Alto, con 5.337 hogares afectados; Lampa, con 1.693 hogares sin luz; Pirque, con 1.307 clientes sin energía eléctrica; y Recoleta, con 507 hogares sin suministro.
El alcalde de Lampa, Jonathan Opazo, y el alcalde de Recoleta, Fares Jadue, han denunciado la situación como «impresentable». Ambos han tomado medidas para apoyar a los afectados en sus comunas, pero señalan que Enel ha mostrado una total indolencia frente a su responsabilidad de asegurar el suministro.
Para el alcalde Jadue, la situación es particularmente frustrante, ya que alrededor de 500 hogares en su comuna siguen sin suministro eléctrico. «Es impresentable la cantidad de días que han pasado sin respuesta alguna», ha declarado. «La empresa Enel ha demostrado su total indolencia frente a lo que es su responsabilidad de asegurar el suministro».
Por su parte, el alcalde Opazo ha destacado que la falta de suministro no sólo implica la ausencia de luz, sino también la imposibilidad de refrigerar alimentos, cargar teléfonos móviles y calefaccionarse en medio del invierno. «Esta situación ha generado una verdadera tragedia familiar para muchas personas», ha afirmado.
Ambas municipalidades han implementado medidas para aliviar la situación de los vecinos afectados. En Lampa, se han establecido puntos de carga para teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos, y se está trabajando para remover árboles caídos y proporcionar lo necesario a los vecinos para retomar su vida cotidiana. En Recoleta, se han habilitado generadores para los casos más críticos y se ha establecido un equipo de emergencia para resolver situaciones urgentes.
Pero los alcaldes no se detienen ahí. Ambos han anunciado que están recolectando datos de los afectados para sumarlos a una demanda colectiva contra Enel. «Enel debe asumir la responsabilidad de este deficiente servicio», ha concluido el alcalde Jadue.
La crisis energética en la Región Metropolitana es un ejemplo más de los desafíos que enfrenta Chile en términos de infraestructura y servicios básicos. La incapacidad de Enel para restablecer rápidamente el suministro después de un sistema frontal pone de manifiesto la urgencia de desarrollar un sistema energético más resiliente y eficiente, capaz de responder a las necesidades de la población en todo momento y circunstancia.