El pasado miércoles, la Asociación Gremial Nacional de la Pequeña Minería de Chile entregó una misiva en La Moneda, el palacio presidencial. La carta pone en evidencia la inquietud de los pequeños y medianos mineros del país, surgida tras la decisión de la gran compañía minera estatal Codelco de adquirir el 10% de las acciones de Quebrada Blanca, propiedad de la Empresa Nacional de Minería (ENAMI), por un total de 500 millones de dólares.
El comunicado, que fue redactado tras tomar conocimiento a través de la prensa sobre la decisión de ENAMI, expresa la preocupación de los pequeños mineros ante lo que consideran una transacción que subestima significativamente el valor real de Quebrada Blanca. Esta es una operación minera cuya vida útil proyectada augura un largo futuro de explotación.
La Asociación Gremial destaca en la carta que la descapitalización de ENAMI podría limitar su capacidad para acceder a créditos y mejorar su situación financiera. Afirman que el monto acordado es mucho menor al valor real del activo, lo que puede poner en riesgo la existencia futura de la empresa estatal. Este punto es de particular relevancia, ya que los pequeños y medianos mineros dependen de una ENAMI bien financiada y modernizada para enfrentar los desafíos del siglo XXI.
Además, el gremio critica la falta de claridad en las políticas gubernamentales hacia ENAMI y cómo esta ambigüedad puede afectar directamente a la pequeña y mediana minería en Chile. En este sentido, los mineros expresan su deseo de ver a una ENAMI refinanciada, con un directorio representativo y un camino claro, sin ambivalencias.
La Asociación Gremial también aprovechó la oportunidad para solicitar la intervención del presidente Gabriel Boric para «revisar y corregir» las decisiones actuales que afectan a ENAMI. El gremio pide una audiencia con el mandatario con el fin de expresarle personalmente sus preocupaciones, anhelos y aspiraciones. La carta está firmada por José Rubén Salinas Bustamante, presidente de la Asociación, junto a otros altos directivos.
El contexto de esta petición radica en la intención de Codelco de expandir su presencia en el mercado del cobre y buscar una solución a la crisis financiera de ENAMI. Sin embargo, esta propuesta ha sido recibida con escepticismo por parte de diversos actores en el sector minero.
Patricio Céspedes, vicepresidente de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), ha declarado que la oferta de Codelco por el 10% de ENAMI en Quebrada Blanca es inferior al valor presente de sus flujos futuros. Según Céspedes, asignar un valor de 500 millones de dólares a este activo representa una subvaloración significativa, ya que este podría generar más de 100 millones de dólares anuales.
Céspedes recalca que el activo de ENAMI no vale 500 millones de dólares, sino que su valor real sería de 1,000 millones de dólares. Además, la falta de transparencia en las negociaciones también ha sido motivo de preocupación en el Congreso.
Parlamentarios de la Comisión de Minería del Senado han concluido que una transacción de esta naturaleza sería contraproducente. En una carta al presidente Boric, advierten que la decisión de vender a Codelco el 10% de participación de ENAMI en el Proyecto Quebrada Blanca podría significar su cierre definitivo, circunstancia que, bajo ningún punto de vista, permitirán.