En el cambiante panorama de la tecnología, la incorporación de la inteligencia artificial (IA) en el hardware se ha vuelto una tendencia creciente. Los procesadores Meteor Lake de Intel fueron los primeros en incorporar una Unidad de Procesamiento Neural (NPU), un componente especializado en IA. Sin embargo, AMD ya había introducido las APUs con capacidades similares.
La integración de la IA en el hardware es una realidad desde hace tiempo. Uno de los mejores ejemplos en el mercado de consumo general es la firma NVIDIA y sus núcleos tensor. Pero si nos centramos en las NPUs, su llegada a la PC es algo relativamente reciente, con mucho camino aún por recorrer y muchas promesas por cumplir.
La integración de las NPUs en los procesadores actuales ha tenido un impacto significativo en su desarrollo. Este componente añade complejidad al diseño, ocupa un espacio considerable a nivel de silicio y, en consecuencia, aumenta el coste de producción. Este incremento en los costos se refleja en un precio de venta más alto para los consumidores.
A raíz de esta realidad, el sitio de tecnología TechPowerUp llevó a cabo una encuesta en la que preguntó a sus lectores si estarían dispuestos a pagar más para disfrutar de las funciones de IA que ofrece una NPU. La respuesta fue abrumadora. De los 26.257 votos emitidos:
– Un 7,4% (1.937 votos) dijo que sí pagarían más por estas nuevas funciones.
– Un 84% (22.057 votos) dijo que no estaría dispuesto a pagar.
– Un 8,6% (2.263 votos) dijo que no está seguro.
Estas respuestas muestran una resistencia generalizada a las NPUs y a las funciones de IA generativa de la segunda generación en la que nos encontramos. Es comprensible ya que se han hecho promesas que aún no se han cumplido. Muchos ven la IA generativa como un simple generador de imágenes que aún no puede trabajar de manera óptima.
A pesar de lo anterior, la IA aplicada al PC de consumo todavía tiene mucho camino por recorrer y muchas promesas por cumplir. Aunque aún en su estado actual, puede ser muy útil para ciertos perfiles profesionales, como por ejemplo, en la generación de imágenes, donde ha demostrado un valor interesante. En este sentido, la IA ha demostrado ser una herramienta útil para la creación de contenidos, permitiendo a los profesionales ser más productivos e independientes.
La evolución de la IA en el hardware es un campo fascinante y dinámico. A medida que avanzamos, seguiremos viendo cómo esta tecnología se integra aún más en nuestros dispositivos cotidianos, cambiando la forma en que interactuamos con ellos y con el mundo. Pero como con cualquier nueva tecnología, es esencial que las promesas se cumplan y que los beneficios superen los costos adicionales para los consumidores. Solo entonces veremos una verdadera adopción masiva de estas nuevas capacidades.
En la era de la información, la creciente integración de la IA en el hardware es un aspecto importante a considerar. A medida que esta tecnología continúa evolucionando y su adopción se vuelve cada vez más generalizada, es probable que veamos grandes cambios en el panorama tecnológico del futuro.