El caso de los documentos confidenciales conocido como los papeles de Mar-a-Lago continúa creando titulares en Estados Unidos. El fiscal especial Jack Smith ha decidido desafiar la decisión de la jueza de archivar el caso en el que el expresidente Donald Trump está imputado por retener documentos confidenciales en su mansión de Palm Beach, Florida, tras dejar la presidencia. Smith notificó su decisión de apelar en un escrito registrado ante el juzgado de Florida encargado del caso. Será un tribunal federal superior el que decida sobre la apelación. En última instancia, la decisión podría llegar hasta el Tribunal Supremo, de mayoría conservadora, que ha favorecido a Trump en varias de sus decisiones.
El documento presentado por Smith se limita a notificar la apelación y no ofrece detalles sobre los argumentos jurídicos que se utilizarán para pedir al tribunal que revoque la decisión de la jueza federal Aileen Cannon, nombrada por el propio Donald Trump. En el pasado, los tribunales superiores han rechazado las decisiones de Cannon, que casi siempre ha fallado a favor de Trump, retrasando indefinidamente el caso hasta finalmente decidir archivarlo.
En una sorprendente resolución de 93 páginas, Cannon concluyó que el nombramiento del fiscal especial, Jack Smith, violaba la Constitución, ya que no había sido designado por el presidente ni confirmado por el Senado. Esta decisión rompe con todos los precedentes anteriores que han defendido la validez de los nombramientos de fiscales especiales por parte del Departamento de Justicia sin la necesidad de la confirmación del Senado.
El caso de los papeles clasificados de Mar-a-Lago comenzó con el registro de la mansión de Trump en Palm Beach por parte de agentes del FBI el 8 de agosto de 2022. En junio del año siguiente, Trump fue formalmente imputado por decenas de delitos, incluyendo conspiración, obstrucción a la justicia, retención dolosa de documentos de seguridad nacional, falsedades y violaciones de la ley de espionaje. Los documentos, que por ley pertenecen a los Archivos Nacionales una vez que un presidente estadounidense deja el cargo, contienen información sensible y su retención puede constituir un delito. Trump también está acusado de negarse a devolver los documentos cuando las autoridades se los solicitaron en reiteradas ocasiones.
A pesar de los obstáculos legales que ha enfrentado el caso, se espera que continúe su curso en los tribunales. Incluso si los jueces concluyen que la decisión de Cannon de archivar el caso no se ajusta a la ley y deciden reabrirlo, Trump podría lograr que se retire la acusación en caso de ser reelegido presidente. Trump ha sido designado formalmente candidato del Partido Republicano a la presidencia en la convención que se celebra esta semana en Milwaukee.
Este caso sigue siendo un elemento clave en la política estadounidense y su resolución podría tener importantes repercusiones en el futuro político de Donald Trump y en el rumbo de la nación. Con las elecciones de noviembre acercándose, la presión está aumentando tanto para el expresidente como para los fiscales y jueces involucrados en el caso.