El exministro chileno, Giorgio Jackson, ha expresado sus disculpas públicas en relación con las declaraciones que hizo en 2020 sobre el caso Pío Nono. Desde su actual residencia en España, Jackson ha hecho un «mea culpa» por haber calificado al excarabinero Sebastián Zamora como un «funcionario criminal». Este incidente ocurrió un día después de los sucesos del puente Pío Nono, donde Zamora fue imputado por el homicidio frustrado de un adolescente, cargo del cual fue recientemente absuelto.
Durante una entrevista en el programa Estado Nacional de TVN, a Jackson se le preguntó si sus declaraciones previas merecían una disculpa, a lo que respondió: «Sin duda hago un mea culpa. Y creo que hay que hacer un mea culpa en la justa medida. Lo principal es que creo que en lo personal y es una situación que nos embarga a quienes estamos en la opinión pública y en el Congreso, reaccionamos muy rápido y con poca información.»
Aun así, Jackson señaló que el comportamiento de Zamora no es lo que se espera de un oficial de la Escuela de Carabineros en un procedimiento policial. Aclaró que el tribunal simplemente había determinado que la acción de Zamora no constituía un homicidio frustrado.
Las disculpas de Jackson han generado reacciones encontradas, especialmente desde la oposición. La diputada de la UDI, Marlene Pérez, criticó a Jackson por mantener su ideología y prejuicio contra la institución de los carabineros, incluso mientras pedía disculpas.
Pérez también criticó al presidente Gabriel Boric, quien también había emitido juicios sobre el caso y había pedido una reforma estructural para los Carabineros. Pérez señaló que Boric no había pedido disculpas a Zamora y a su familia, a pesar de haber prometido durante su campaña que se disculparía cuando se equivocara.
El diputado y jefe de la bancada de Evópoli, Jorge Guzmán, también criticó a Jackson, acusándolo de actuar de manera visceral, rápida y generalmente sin información. Guzmán sostuvo que este comportamiento es característico del Frente Amplio y del Partido Comunista, y que socava constantemente el estado de derecho y las instituciones en Chile.
El Partido Republicano ha adoptado una postura similar, con su fundador y ex candidato presidencial, José Antonio Kast, instando al presidente a disculparse con Zamora. El diputado republicano, Luis Fernando Sánchez, también ha hecho un llamado similar a través de las redes sociales.
La diputada Camila Flores (Renovación Nacional) sostuvo que el daño a Zamora ya estaba hecho y que ninguna conversación podría reparar el daño que Jackson y otros habían causado. Agregó que Zamora no debería perder el tiempo con falsas disculpas y debería centrarse en otras cosas, como la posibilidad de reintegrarse a los Carabineros.
La bancada de Mujeres por la Libertad también ha pedido que Zamora sea reintegrado a los Carabineros y ha instado al presidente a pedir disculpas públicas.
El presidente y diputado de Amarillos, Andrés Jouannet, calificó las disculpas de Jackson como «un caradurismo brutal». Jouannet criticó a Jackson por no haber condenado los ataques a las comisarías de Carabineros durante los disturbios.
La diputada Karen Medina (Partido de la Gente) sostuvo que es complicado simplemente admitir un error y pedir disculpas a quienes han sido gravemente dañados y han perdido sus empleos debido a las acciones políticas irresponsables.
Finalmente, el senador Fidel Espinoza (PS) criticó las disculpas de Jackson, calificándolas de «doble estándar». Espinoza instó a Jackson a disculparse directamente con Zamora y a reconocer que lo había tratado mal.