El creciente interés de los adultos mayores en los videojuegos móviles está desafiando las percepciones tradicionales de la demografía de los jugadores. Marimar Cortizo, una jubilada de 72 años de Leganés, es un ejemplo de esta tendencia. «Juego bastantes horas, pero bastantes», dice. Su juego favorito es el Bubble Shooter, del que ha completado más de tres mil niveles varias veces. Cada vez que termina el juego, pide a algún miembro de su familia que borre y vuelva a descargar la aplicación para poder empezar de nuevo.
El interés de Cortizo en los videojuegos móviles no es una excepción. Según datos compartidos en exclusiva con EL PAÍS por GfK Dam, una empresa de medición de audiencias digitales en España, cada vez hay más adultos mayores que utilizan teléfonos móviles y los juegos son su dedicación favorita. De las 15 aplicaciones más utilizadas (medidas en horas), 14 son juegos. Las más populares entre los mayores de 65 años en abril fueron Hay Day, Number Match, Sudoku, Candy Crush y Color by Number. La única aplicación que no es un juego es Facebook, que ocupa el puesto número 13.
A medida que aumenta el uso de juegos móviles entre los mayores de 65 años, también se observa una reducción notable de la brecha digital en este grupo de edad. Hace poco más de una década, cuando los teléfonos móviles se popularizaron, esta generación se adaptó rápidamente. Aunque su adopción de la tecnología fue más lenta en comparación con las generaciones más jóvenes, ahora el uso de los teléfonos móviles e Internet entre los mayores es cada vez más común.
“La gente de más de 66 años hace ocho años no navegaba por internet y gradualmente han ido entrando. Es por dónde ha venido el crecimiento en internautas. Por primera vez estamos midiendo a gente de más de 75 hasta valores más atípicos de 90 y pico, porque afortunadamente cada vez más se incorporan y utilizan internet”, explica David Sánchez, director de Soluciones Digitales en GfK Dam.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que, aunque el tiempo dedicado a los juegos es alto, no todos los adultos mayores juegan. “De mis amigas, con las que voy a pilates o restauración, ninguna juega, no tienen esa afición, pero en el autobús sí veo a gente mayor que también juega”, afirma Ana María Blanco, de 71 años y de Tres Cantos (Madrid).
Además, los juegos móviles no son la única aplicación que los mayores utilizan. Como todas las generaciones, utilizan principalmente sus teléfonos móviles para comunicarse. “Obviamente, los juegos consumen mucho porque son un pasatiempo y cuando te has jubilado, si no tienes responsabilidades de cuidados, tienes más tiempo de ocio y es posible que juegues, aunque en general la aplicación que manda es WhatsApp”, dice Mireia Fernández-Ardèvol, profesora de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).
Otro aspecto interesante revelado por los datos de GfK Dam es el uso extendido de las aplicaciones bancarias entre los mayores de 65 años. Ocho de cada diez las utilizan, una cifra casi igual a la de los millennials, entre los que la cifra es de nueve de cada diez. Sin embargo, hay diferencias significativas en el uso de las redes sociales y los servicios de streaming. Un joven de la generación Z utiliza YouTube, por ejemplo, el doble de tiempo que un mayor. Facebook es justo al contrario.
Es evidente que la brecha digital entre las generaciones mayores y más jóvenes se está reduciendo gradualmente. Sin embargo, es importante seguir investigando y comprendiendo las prácticas digitales y el impacto tecnológico en las vidas de las personas mayores para garantizar que estas tecnologías se utilicen de manera efectiva y segura.